“Hoy he vivido algo bochornoso”: los audios del comité más tenso de Ciudadanos
El Consejo General de Ciudadanos celebrado este sábado en un hotel de Madrid vivió una fuerte tensión interna nada más comenzar su reunión, a la que asistió Inés Arrimadas, que guardó silencio. Varios de los miembros de este órgano, el máximo entre congresos, pidieron la palabra al inicio del Consejo para expresar su malestar porque se les impidió que hubiera un debate previo sobre la lista, cerrada y bloqueada, con los 16 nombres que había presentado el presidente, Manuel García Bofill, para formar parte de la gestora. Este órgano será el que liderará el partido de forma transitoria hasta la celebración de la Asamblea General extraordinaria del 15 marzo en la que se elegirá una nueva dirección.
Según el relato dado por asistentes al cónclave a eldiario.es, la tensión se inició nada más llegar a la sala de reunión: “Había una urna en la mesa para votar. A la entrada, a los consejeros nos dieron un número para dirigirnos a votar en la urna, pero el presidente –García Bofill– dijo que se votara a mano alzada con cartulinas verde, blanca o roja”. Este fue el primer escollo porque algunos consejeros pidieron que la votación fuera secreta, sin éxito.
La lista presentada por Bofill no gustó a un sector del Consejo General porque opinaban que no suponía ninguna renovación. De hecho, la gran mayoría son dirigentes procedentes de la anterior dirección de Ciudadanos, nombrada por el expresidente Albert Rivera: José Manuel Villegas, Fran Hervías, Miguel Gutiérrez, Carlos Cuadrado, José María Espejo Saavedra... todos ellos pertenecientes al llamado 'núcleo duro' de la anterior Ejecutiva.
La lista fue leía en alto por Bofill sin que se hubiera remitido antes a los consejeros. A continuación, y de inmediato, se sometió a votación, a mano alzada, sin permitir un debate previo sobre ella. Además, según las fuentes consultadas, hubo alguna petición para que esa votación fuera en urna, de forma secreta, pero Bofill esgrimió que la iniciativa debía contar con el apoyo de una quinta parte de los consejeros y no dejó siquiera intentarlo.
Hasta 17 miembros pidieron la palabra. Aunque la lista fue aprobada con amplia mayoría, hubo cinco votos en contra y seis abstenciones.
Según ha podido confirmar eldiario.es, votaron en contra el asturiano Nacho Prendes, la castellanomanchega, Orlena de Miguel, Fernando Navarro, Eduardo de Castrón y Luis Armando Fernández. Otros dos consejeros, los murcianos Miguel Sánchez y José Luis Martínez se negaron a ejercer el voto como protesta ante el tipo de votación. Algunas de las intervenciones más broncas las protagonizaron veteranos dirigentes del partido que esta vez no se callaron.
Estos son los audios de la reunión:
Ignacio Prendes (exdiputado asturiano y miembro de la Mesa del Congreso en las anteriores legislaturas), crítico con los pactos de Rivera:
“Un partido que no da explicaciones a sus afiliados, ni hace un análisis de los resultados, ni asume responsabilidades pierde el favor de los votantes y de los afiliados. Albert asumió su responsabilidad, y todos los que estábamos con él en el Comité Ejecutivo deberíamos irnos también. Debemos todos asumir responsabilidades. El nombramiento de esta Gestora es un mal mensaje para los afiliados y para la sociedad española. No podemos hacer como si no hubiera pasado nada, y este consejo genera está haciendo eso. El desánimo y el desafecto reinará en las Agrupaciones con esta decisión”.
Francisco Igea, vicepresidente de la Junta de Castilla y León, ganador de las primarias frente a Silvia Clemente tras destaparse el pucherazo en las primarias. Crítico con los pactos de Rivera:
“España necesita un partido de centro liberal. Hoy he vivido algo bochornoso en este Consejo General. Ha habido primero una votación y luego el turno de intervenciones. Es asombroso. Esto no es democrático. España esperaba que Ciudadanos desalojara a los nacionalistas de condicionar las decisiones y no hemos sido capaces. Hemos defraudado a los españoles, y lo que es peor, 20 días después de las elecciones no hemos hecho un análisis de lo que ha pasado. Somos aquí 130 y somos responsables ante los ciudadanos. Nuestro partido debía pelear por un futuro mejor para nuestros hijos y por la libertad, y lo que ha ocurrido hoy aquí no se parece en nada a la libertad”.
A Igea le replicó Francisco Sierra, miembro de la comisión disciplinaria:
“El bochorno lo han provocado algunos cargos que han querido destruir el partido desde dentro. Uno de ellos en plena campaña poniéndonos verdes ante altos funcionarios. Yo como miembro del comité disciplinario estoy orgulloso del trabajo que hemos hecho expedientando a todos aquellos que no comparten nuestros valores”.
Carlos Carrizosa, jefe de la oposición del grupo Ciudadanos en el Parlament de Catalunya:
“Yo veo que Cs es un partido democrático y que va a afrontar una nueva etapa. Me cuesta pensar que no hemos defendido la libertad, especialmente los que estamos en Catalunya. Nuestra responsabilidad es seguir y este equipo seguro que tendrá en cuenta a las bases. No nos vamos a abrir en canal porque los medios de comunicación están deseando cogernos por las vísceras para hacernos daño. Nosotros somos los que estamos unidos y los romanos están ahí fuera”, aseguró como respuesta a otro interviniente anterior que dijo que “Julio César no ganaba las batallas, lo hacían los soldados romanos”, en alusión a contar con las bases.
El diputado autonómico Luis Armando Fernández aseguró que había votado en contra porque “la estructura de Ciudadanos no se corresponde con la democracia representativa. Debemos dar poder a las bases para que ellos nombren a los comités autonómicos y locales. En esta gestora no veo que eso vaya a cambiar”.
Luis Garicano, jefe de la delegación del grupo de Ciudadanos en Europa, y ahora miembro de la gestora como responsable de Internacional:
“A los que hoy habéis votado en contra os digo que este sigue siendo vuestro partido. El partido va a sufrir cambios muy importantes. Nadie tiene duda de que será así”.
El murciano Miguel Sánchez reconoció que a él le hubiera gustado votar en urna, “esa que hay ahí, si me lo hubieran permitido”, dijo señalando a la que había colocada en la sala. “Esto no es baladí. Nuestros afilados nos lo piden, y por eso, yo hoy no he votado ni sí, ni no, ni abstención”, afirmó. Su compañero José Luis Martínez no tuvo tampoco reparos en señalar: “Nos hemos estrellado y nadie habla de lo que ha pasado. Los militantes esperaban algo y no lo he visto. Hay que votar en urnas y siempre después de un debate. Esto que ha pasado no me gusta. Yo no he votado nada. Este no es el camino y así vamos a la desaparición”.
El alcalde-presidente de Melilla, Eduardo de Castro, justificó su voto en contra afirmando que “la lealtad no tiene que ser sinónimo de sumisión, y la crítica no tiene que ser sinónimo de deslealtad. Hay muchos que están esperando un gesto, pero con esta gestora el titular será ”continuismo“. Pese a todo, dijo que aceptaba el resultado. final de la votación.
Otros consejeros insistieron también en hacer “una reflexión” y dar voz a las bases, así como adelantar la fecha de la Asamblea “porque si no vamos a dar una imagen de continuismo”. “Confío en que la gestora cree un canal de comunicación con las bases en toda España. Los afiliados esperan que así sea”, abundó otra consejera.
Poco después, al trascender el bronco debate, el exconcejal de Las Palmas, Javier Amador, que el pasado mes de octubre abandonó su cargo por discrepancias ideológica con el partido, anunció en Twitter que dejaba la militancia en Ciudadanos. “Quise dar una oportunidad a ver si Ciudadanos aprendía la lección que dieron las urnas, pero tras un Consejo General bochornoso confirmo que están encantados de conocerse y que la única estrategia en el corto plazo es aplastar a la discrepancia. He decidido tramitar mi baja”, escribió en su perfil.
Amador añadió que “ojalá” hubiera en Ciudadanos “más gente como Francisco Igea”. “Pero tiene pinta de todo lo contrario. Soy muy pesimista tras lo que he visto hoy”, ha lamentado.