Vallecas y Usera pasan de los carteles de la campaña sucia: “Aquí la gente tiene ideales arraigados”

Los vecinos de Vallecas y de Usera pasan delante de carteles con las fotografías de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias pero sin reparar en ellos; la inscripción “No contéis conmigo” encima del hashtag “yo no voto” no les llama la atención. Son parte de una campaña de intoxicación y desmovilización de la izquierda impulsada por un trabajador de una empresa contratada por el PP y por un militante del partido. Con ellos han empapelado algunas paredes de estos barrios de Madrid que tradicionalmente votan a partidos de izquierda para promover la abstención en las elecciones del 10 de noviembre.

“Será de las elecciones”, dice un hombre que camina a unos metros del Puente de Vallecas. “Pues no lo sé, ganas que tiene la gente de tocar las narices”, comenta otro. Las personas que caminan cuesta arriba por la avenida de la Albufera, donde el PSOE obtuvo la mayoría de votos en las últimas elecciones, avanzan sin prestar atención a los carteles. Muchos ya han sido arrancados en parte y otros, tapados con nuevos carteles en paredes empapeladas con decenas de anuncios.

Yolanda Casares, vecina del barrio, los ve por primera vez este jueves. “No contéis conmigo”, lee en voz alta y se responde: “Claro, no voy a contar”. Está “harta”: “Cuando le das oportunidad a la gente y no hace lo que tiene que hacer, hay que darle la oportunidad a otro”. Casares asegura que en ella el mensaje no va a calar porque se lee “todos los programas electorales”. “Eso debería de hacer la gente”, sugiere.

Ainhoa Alcaide, en cambio, es de las que se han detenido a observar: “Me he quedado mirando porque no entendía”. Primero creyó que los simpatizantes del PSOE y de Podemos animaban a no votar a sus propios candidatos, pero enseguida entendió que no podía ser. Pensó, entonces, “habrán sido los otros”.

Detrás de la campaña, que también incluye mensajes engañosos en Facebook están Josep Lanuza, que trabaja para Aleix Sanmartín, uno de los actuales consultores políticos del PP, y Javier Ager Solano, un joven militante de Nuevas Generaciones en Murcia, según ha desvelado eldiario.es. Además de empapelar zonas de Vallecas y Usera, han pegado carteles en zonas de voto progresista de Córdoba, de Sevilla, de Granada, de Murcia y de Valencia. Tanto el partido como su asesor se han desvinculado de la campaña y la atribuyen a una iniciativa personal de Lanuza y Ager.

Alcaide cree que a muchos les dará igual “ver un papel” en la pared, aunque también reconoce: “Ningún partido se gasta dinero en algo que no crean que vaya a funcionar”. Está convencida de que ese tipo de mensajes no afectará su voto. Le inquieta, sin embargo, entender “cuáles son los límites de la campaña”. “¿Es algo legal? ¿Hay un filtro? Si no lo es, ¿tendrán alguna consecuencia?”, se pregunta.

“Esto es un aprovechamiento desleal”, critica Juan Román Lara, que vio los carteles primero en la televisión. Opina, sin embargo, que en “una zona progresista y roja” como Vallecas poco va a influir. “No creo que en Serrano haya puesto muchas. Ahí se las pueden ahorrar directamente”, apunta.

Con él coincide Alberto Ruiz García, vecino de Usera que asegura, como otros, que vio los carteles por primera vez en la calle a principios de esta semana. “Lo leí y pasé”, dice. “Si quieren conseguir la desmovilización, conmigo no. Juegan con la gente que a lo mejor no se documentó ni lee mucha prensa. Supongo que es la estrategia, desmovilizar a cierta parte del electorado”, señala.

“La abstención beneficia al PP, que quiere que no votemos. Y lo conseguirá, porque tienen la pasta”, opina Iván Fernández mientras camina por la avenida Marcelo Usera en dirección a Plaza Elíptica. Habla mientras raspa por la esquina uno de los carteles con las fotos de los candidato, sin conseguir arrancarlo. En esa calle, donde hay al menos una treintena de carteles, el PSOE fue el partido más votado el 26-M. “Me da igual lo que hagan todos porque yo no voto. Pero aquí la gente tiene ideales arraigados”, añade.

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