Almeida dice que supo de la intervención de su primo en el contrato de las mascarillas por elDiario.es

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se enteró de que su primo había intervenido en el contrato de mascarillas leyendo elDiario.es. El regidor ha comparecido este jueves en la Junta de Distrito de Villa de Vallecas para defender el carácter de víctima del consistorio en todo esto y para asegurar que hace una semana no sabía que su familiar había sido el primero en contactar con los empresarios: “Me entero de que mi primo ha podido intervenir en el contrato a raíz de las información que publicó elDiario, lo que hacemos esa misma semana es un análisis documental”, ha dicho el alcalde.

En su comparecencia, Martínez-Almeida ha defendido que en ese momento, marzo de 2020, el mercado internacional era una “jungla” en el que el Ayuntamiento se movió por un único interés: conseguir material de protección para el personal esencial. “Si usted me dice que a posteriori sabiendo lo que ha pasado haríamos un contrato para que dos personas se compraran coches de lujo, no lo haríamos”, ha dicho. “También digo que defiendo la actuación de todos los técnicos del Ayuntamiento durante esos días”, ha añadido.

El regidor madrileño ha explicado que Luis Medina Abascal, uno de los empresarios ahora ya imputados, contactó con su primo a través de una persona conocida de ambos. Y ha reiterado que su primo le dio un email que se usaba para centralizar los procesos de contratación de material en situación de emergencia. Ha afirmado, como novedad, que existen dos correos: Hay dos correos electrónicos de Luis Medina al buzón de coordinación general de la alcaldía el 18 y el 19 de marzo. Esa es la forma, como tantos, que tuvo de entrar en contacto con el Ayuntamiento. Tuvimos más de 1000 ofrecimientos durante aquellos días“, ha añadido.

A preguntas de este periódico, el alcalde ha especificado que no sabe si estos correos electrónicos han sido entregados a la Fiscalía Anticorrupción a lo largo de sus requerimientos de información. En esos emails, añade, Medina “proporciona su número de móvil” y ahí empieza su contacto con el alto cargo de Hacienda que ha testificado ante Anticorrupción.

El alcalde también insiste en que Luis Medina no tenía una relación de amistad con su primo, sino que contactó con él a través de una persona intermedia, en contra de lo afirmado por Anticorrupción en su querella. “Es difícil que haya una relación de amistad cuando no sabe si el familiar es hermano o primo”, dice en alusión a una entrevista ofrecida este mismo jueves por Medina a El Confidencial.

Sobre la intervención de su primo, niega Almeida que se trate de una intermediación: “No se puede identificar como intermediación que una conocida común le diga que hay una persona que puede suministrar material sanitario y que quiere contactar con el ayuntamiento, y esta persona le diga que hay un buzón de email, es difícil entender que hay intermediación”, afirma. Además ha destacado que después de más de un año “no se le ha citado ni a él ni a mi”.

Ciudadanos pide auditorías

La vicealcaldesa por Ciudadanos, Begoña Villacís, ha comparecido después del alcalde por separado, y no de forma conjunta como es habitual. “Lo lógico es que comparezcamos hoy por separado, es muy importante que el ayuntamiento se quede al margen de todas las noticias que se están dando y preservar la institución”, ha dicho. “No tengo por qué no creerle”, ha añadido sobre las explicaciones que ha dado Almeida unos minutos antes en la misma sala.

La vicealcaldesa de Madrid, tras rechazar que en esta situación vaya a romper la coalición gubernamental que mantiene con el Partido Popular, ha anunciado que su partido exige la puesta en marcha de dos auditorías: una auditoría externa ya que, dice, “está claro que los controles han fallado”, y una segunda auditoría encargada a la Cámara de Cuentas.

Villacís ha cerrado la puerta por ahora a romper la coalición municipal. “Ese escenario no está encima de la mesa”, ha dicho sobre una posible salida del ejecutivo madrileño. Tampoco impulsar una moción de censura: “No está encima de la mesa, con los datos que conocemos no procede”.