Cristina Narbona, la favorita de Pedro Sánchez para presidir el PSOE
Cristina Narbona es la favorita de Pedro Sánchez para presidir el PSOE. La exministra de Medio Ambiente ha formado parte de la candidatura en la campaña de las primarias, junto a otros veteranos como Manuel Escudero, José Félix Tezanos o Josep Borrell; y participó en la elaboración del documento 'Somos Socialistas' que ahora se incorporará al proyecto que salga del congreso. Narbona se sitúa ahora como preferida de Sánchez para ocupar la presidencia del partido, según confirman fuentes de la máxima confianza del secretario general.
La presidencia del PSOE suele ocuparla un dirigente de prestigio en el partido dado que, según establecen los estatutos, “ostenta la representación oficial”. Es quien modera los debates que se producen en el seno de la Ejecutiva y preside los actos oficiales de la organización. Narbona tiene un perfil “perfecto” para ocupar ese puesto, según afirman dirigentes próximos a Sánchez, que aseguran que es su “preferida”.
Sin embargo, admiten que tiene dificultades para ocupar la presidencia del PSOE por su puesto en el Consejo de Seguridad Nuclear, organismo en el que es consejera a propuesta del partido. A la exministra de Medio Ambiente le queda aún mandato por delante, con posibilidad de prórroga, y quiere quedarse, pero no pretende compatibilizar ambos cargos.
“No es planteable ser miembro del Consejo de Seguridad Nuclear y miembro de la Ejecutiva”, señalan fuentes socialistas, que apuntan a que el proyecto de Sánchez “huye precisamente de la acumulación de cargos”, aunque establece que pueden compatibilizarse un cargo orgánico y uno institucional, que sería este caso; pero Narbona no se lo plantea: o uno o el otro.
En el entorno de Sánchez aseguran que le ha ofrecido a la exministra formar parte de la dirección, pero que aún no se ha producido un reparto de cargos. No obstante, el ofrecimiento al alcalde de Valladolid, Óscar Puente, sí se concretó, según reveló él mismo: la portavocía de la Ejecutiva. Puente dice que aún no ha dado una respuesta, pero se inclina por aceptar el cargo dado que lo ve compatible con la alcaldía.
Fuentes socialistas apuntan a otros nombres como posibles presidentes del partido. Entre ellos están el del alcalde de Dos Hermanas, Quico Toscano, y el de la exministra Carmen Calvo, que también se sumó a su proyecto. Toscano es uno de los principales representantes de la oposición interna a Susana Díaz en Andalucía y apoya a Pedro Sánchez desde el inicio.
La exministra de Cultura también se sumó al proyecto de Sánchez en la recta final de la campaña como Beatriz Corredor, que ocupó la cartera de Vivienda en uno de los mandatos de José Luis Rodríguez Zapatero. Algunos la miran para ocupar un puesto de relevancia en la dirección. “No tiene ningún peso, no mueve a nadie. Es más simbólico porque es exministra”, dice un destacado sanchista.
La presidencia del PSOE ha estado en los últimos años en manos de socialistas andaluces. Susana Díaz colocó en el primer mandato de Sánchez a Micaela Navarro, que fue una de las dimisionarias en septiembre. Alfredo Pérez Rubalcaba tuvo en la presidencia a José Antonio Griñán, que había apoyado a su rival, Carme Chacón, en el 38º Congreso. A Griñán le precedió su antecesor en la Junta de Andalucía, Manuel Chaves. Ambos se dieron de baja del partido al ser imputados en el caso ERE.