No, no hay ninguna investigación abierta por un supuesto asesinato de Botín
La noticia corre de whatsapp en whatsapp por los móviles de directivos y en las plantas nobles de grandes empresas pero no es cierta. Ningún juzgado español investiga el supuesto asesinato de Emilio Botín ni hay ninguna diligencia abierta que apunte a la muerte violenta del presidente del Banco Santander. Sí hubo una abracadabrante denuncia presentada por un empresario, Juan Muñoz Bloise, dedicado al mundo de la comunicación y los diarios confidenciales que fue archivada en 2015 por el juzgado número 1 de la Audiencia Nacional que dirige Santiago Pedraz pocas semanas después de presentarse.
El asunto fue utilizado por el pseudosindicato Manos Limpias para intentar extorsionar al Banco Santander y ha revivido esta semana en las redes a través de varios diarios digitales de corte ultraconservador y sin apenas audiencia como La Tribuna de Cartagena, Rambla Libre que dirige el columnista ultraconservador Enrique de Diego o la web del exlocutor de la Cope César Vidal.
En un auto dictado el pasado 30 de octubre de 2017, el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, incorpora el episodio de la denuncia sobre el hipotético asesinato de Emilio Botín a la causa abierta contra el pseudosindicato Manos Limpias y la supuesta entidad sin ánimo de lucro Ausbanc. Según escribe Pedraz, “Luis Pineda empleó su influencia y peso en Manos Limpias para que por parte del sindicato no se continuasen las acciones que se tenían previstas en relación a la denuncia por el presunto asesinato de Emilio Botín y así aprovechar la petición de financiación vía convenio publicitario con el Banco de Santander”.
El magistrado Santiago Pedraz sabe de lo que habla porque él mismo había archivado definitivamente una insólita denuncia presentada por un empresario dedicado al mundo de la comunicación y los diarios digitales que en agosto de 2015 llevó a la Audiencia Nacional un escrito de 12 folios donde acusaba a la actual presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín, de urdir junto a su madre, Paloma O'Shea, el asesinato de su padre, que habría sido ejecutado por un supuesto narco, Jesús Samper Gaviria, de acuerdo con dos miembros del equipo de seguridad del Banco Santander. El supuesto traficante de cuya existencia no hay noticias en los juzgados españoles lleva en la denuncia los dos apellidos de dos expresidentes de Colombia durante la década de los 90 (César Gaviria y Ernesto Samper) y también el del célebre narco Pablo Escobar Gaviria.
Pedraz ordenó durante la primavera de 2015 un par de diligencias de trámite -la policía llegó a remitir un cuestionario al jefe de seguridad del Santander, Carlos Rubio, antes de cerrar definitivamente la causa. El pasado 30 de octubre, en el auto en el que procesa a los líderes de Ausbanc y Manos Limpias, el juez escribe que la trama también intentó extorsionar al Santander con la historia del supuesto asesinato.
Al día siguiente, esos diarios ultras sin apenas difusión recuperaron ese insólito thriller que ha sido desbaratado en los juzgados. El abogado Carlos Javier Sánchez-Seco Vivar, que representa al empresario denunciante, admitió este miércoles a eldiario.es que no hay caso. Y que la delicada salud de su cliente, Juan Muñoz Bloise, quien ya fue condenado según vozpopuli a cinco meses de prisión el pasado marzo por un intento de extorsión al empresario Juan Abelló, le ha impedido presentar de nuevo la denuncia en un juzgado de Móstoles, tal y como habían planificado.