Izquierda Unida vuelve a ser, una vez más, la formación política más perjudicada por el sistema de reparto de escaños denominado D'hont. La candidatura liderada por Alberto Garzón ha obtenido -escrutado el 98,5% de los votos- un total de 908.024 sufragios y tan solo dos escaños. Ambos diputados le llegan a Izquierda Unida por la Comunidad de Madrid, donde la formación ha consegido 184.184 sufragios (97,3% escrutado).
Esto significa que Izquierda Unida-Unidad Popular es la sexta formación política en votos y la undécima en representación parlamentaria. Con cuatro veces más de votos que EH Bildu (217.985) obtiene los mismos diputados. El resultado de IU, pro ejemplo, multiplica por 12 el de Coalición Canaria y, sin embargo, solo consigue un diputado más.
Los partidos políticos con menos votos que Izquierda Unida, pero con más escaños son Compromís-Podemos (666.598 votos, 9 escaños), ERC (591.177 votos, 9 diputados), Democracia i Llebertat (558.768 votos, 8 escaños), En Marea (394.199 votos, 6 diputados) y PNV (300.973 votos, 6 diputados).
A Izquierda Unida, cada diputado le ha costado 454.012 votos, frente a los 57.692 del PP, los 59.697 del PSOE, los 74.164 de Podemos o los 85.993 de Podemos. Esto significa que al ganador de las elecciones, el Partido Popular, le cuesta obtener un diputado ocho veces menos votos que a IU.
En cualquier caso, Izquierda Unida ha conseguido aproximadamente la mitad de votos que en las elecciones de 2011, comicios que le supusieron 11 diputados. La sangría de votos es menor, aproximadamente la mitad que en las anteriores elecciones. El objetivo de la formación, conseguir un grupo propio en el Congreso, queda muy lejos. Solo Alberto Garzón y su número dos, Sol Sánchez, representarán a Unidad Popular-Izquierda Unida en la Cámara Baja.
Uno de los debates previo a las elecciones giró en torno a la posbilidad de que Podemos e Izquierda Unida concurrieran en una sola candidatura. El acuerdo no fue posible. La formación de Pablo Iglesias más las distintas confluencias territoriales han sumado un total de 69 escaños.
Eldiario.es ha realizado el cálculo de qué habría ocurrido si Izquiera Unida y Podemos hubieran concurrido juntos. En total, Izquierda Unida habría aportado 16 escaños más a ese espectro electoral de la izquierda, con 85 escaños en total.
El más perjudicado por esa frustrada alianza habría sido el Partido Popular, que hubiera perdido 9 escaños. Seguido de Ciudadanos, que habría obtenido 36 escaños, en lugar de 40. El PSOE habría conseguido dos escaños menos, 89, en lugar de los 91 de Pedro Sánchez.