El exministro francés de Economía Emmanuel Macron, candidato a las elecciones presidenciales en 2017, desdeñó las primarias de la izquierda y las consideró más “un ajuste de cuentas” que un debate democrático.
En una entrevista publicada hoy en el Jornal du Dimanche (JDD), Macron, de 38 años, aclaró que se presentará a las presidenciales bajo el paraguas del movimiento que ha fundado “En Marche!” y respondió a los dirigentes del gobernante Partido Socialista (PS), que le pidieron que participe en las primarias para no fracturar la izquierda.
“No se trata de unas primarias de la izquierda. Los Verdes y los Radicales no participan en ellas. Son más bien unas primarias del PS que probablemente enfrentarán a un futuro ex primer ministro (Manuel Valls) contra ministros con los que se enfrentó en el Gobierno”, sostuvo.
Macron, un antiguo militante socialista que fue ministro de Economía entre 2014 y 2016 en el Gobierno de François Hollande, restó credibilidad a las primarias en las que participan los socialistas porque las considera “un ajuste de cuentas”.
“Hace ocho meses que se ve que a la izquierda eliminada en el primer turno (de las presidenciales). Cualquiera que gane estas primarias no llegará a un segundo turno”, refirió el candidato presidencial, quien juzgó que las luchas intestinas son fatales en el PS.
Las primarias de la izquierda francesa abrieron su periodo de inscripciones el pasado 1 de diciembre, cuando formalizó su candidatura el exministro de Economía francés Arnaud Montebourg.
Debido a la decisión del presidente François Hollande, que renunció a renovar su mandato, los analistas pronostican que se presentará el primer ministro francés, Manuel Valls, quien tendría que dimitir de su puesto para centrarse en la carrera presidencial.
Macron, que ha decidido presentarse a la presidencia sin ningún apoyo partidario y con el respaldo de personalidades del mundo de los negocios, se consideró un aspirante “progresista” que cree en “Europa”, “la reconciliación de la libertad y el progreso, la innovación y la transición energética”.
Según los últimos sondeos, al exministro de Economía se le otorga entre 13 y 15 % de la intención de voto en el primer turno del 23 de abril de 2007, lejos de la ultraderechista Marine Le Pen (entre el 23 % y el 24 %) y del ex primer ministro centro-derechista François Fillon, liberal en la economía y conservador en lo social.