El Ayuntamiento de Pajares de la Laguna (Salamanca) sigue esquivando la Ley de Memoria Histórica y mantiene la denominación franquista de dos de sus calles. Hace 10 meses, su alcalde, Juan Antonio Benito de Dios (PP) se vio obligado a dimitir por una carta plagada de descalificaciones hacia el presidente de la Cámara, Pío García-Escudero, al que llamó “mamporrero”, el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el grupo Compromís.
Su sucesor en el cargo, Juan Antonio Valle de Dios, se ahorra los insultos pero sí incurre en lo que el portavoz de Compromís, Carles Mulet, denomina “troleo”. En una carta remitida el pasado 14 de septiembre, Valle de Dios pide a García-Escudero “información sobre en qué términos incumplen la normativa actual los nombres de las Calles Calvo Sotelo –ministro de Hacienda en la dictadura de Primo de Rivera- y Salas Pombo- jefe provincial del Movimiento y gobernador civil en la etapa franquista-”. El regidor admite que, en todo caso “se seguirá tratando dicho asunto en próximos plenos” y finaliza con “un saludo para el Senado de Pueblo Español”,
Carles Mulet, considera que el hecho de que “después del escándalo monumental” protagonizado por su antecesor, “el actual alcalde continúe burlándose de la cuarta autoridad del Estado, demuestra la necesidad de modificar urgentemente la Ley de Memoria Histórica, y a establecer unos plazos taxativos para cumplirla, un protocolo de actuaciones y un régimen sancionador”.
“Ahora se burla con impunidad, como si en un control de alcoholemia, o en una detención por asesinato, el culpable de incumplir la ley preguntase a la autoridad que le explicase en qué está incumpliendo la ley, y nadie actuase contra él por el simple hecho de preguntar”, lamenta el portavoz de Compromís.
Los graves insultos de Benito de Dios no merecieron reproche penal. La Fiscalía de Salamanca consideró que no había delito. El exregidor no sólo insultaba y se burlaba de la Ley de Memoria Histórica refiriéndose a ella como “Ley de Memoria Histérica o de Mentira Histórica”, también utilizaba la web municipal para colgar manifiestos ultraderechistas y revisionistas. Tras publicar su contenido este diario, el texto se eliminó. Su sucesor tan sólo mantiene el escudo del municipio.