Rubalcaba respalda eliminar la religión del currículum y ve lógico que el programa de Sánchez se parezca al suyo

El exsecretario general del PSOE Alfredo Pérez Rubalcaba ha respaldado este martes la propuesta de eliminar la religión del currículum educativo que el PSOE lleva en su programa electoral presentado y ha reclacado que la laicidad del estado es un tema que se discutió en la Conferencia Política del PSOE de 2013, siendo él aún secretario general.

En una entrevista en RNE recogida por Europa Press, ha defendido que España “tiene que revisar su acuerdo con la Santa Sede” porque puede provocar “distorsiones”. A su juicio, se podría dar religión en los colegios públicos pero fuera del horario escolar, como si fuera una actividad extraescolar, “de esa manera reciben la formación religiosa que quieren los padres y no se produce distorsión académica”, ya que no hay asignatura que pueda ser alternativa a la religión. En su opinión, las otras materias que se ofertan, como ética o historia de otras religiones, son asignaturas que también son buenas para los que eligen estudiar religión.

Además, ha asegurado que no le sorprende que entre el programa presentado por el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y el que el propio Rubalcaba presentó en 2011 haya similitudes. Además, cree que el programa es el reflejo de la revisión los socialistas que hicieron de sus políticas Conferencia Política.

Rubalcaba ha argumentado que durante estos cuatro años el PSOE ha cambiado, porque cada “dirección introduce correcciones” y porque las cosas han cambiado mucho en este último año y medio a causa de la situación económica, política y territorial en la que se encuentra España.

CUANDO SE DEJA LA POLÍTICA SE PUEDE DIGERIR O FERMENTAR

El exvicepresidente del Gobierno, que dejó la política y ejerce de profesor de Química Orgánica, ha resaltado que cuando uno deja la política hay dos modelos distintos: digerir o fermentar y “fermentar es fatal”. Así, preguntado por si el modelo de fermentar es el que ha tomado el expresidente José María Aznar ha contestado que sí y que vio una intervención de Aznar reconviniendo a Rajoy en la que lo malo no era lo que decía sino el tono que “era de alguien que tiene pH uno en el estómago”.

También ha criticado las últimas entrevistas del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de que ha opinado que parecen “que predicen esta cosa del convento dentro, que es un poco escalógico”.

PODEMOS NUNCA VA HACER EL SORPASO AL PSOE

Por otro lado, ha augurado que “Podemos nunca va a hacer el sorpaso al PSOE” porque su formación ocupa un “espacio en el centro izquierda español” por sus políticas y por su historia. A su juicio, Podemos quería ocupar el espacio del PSOE y para ello está haciendo “contorsiones” para encajar el programa político, lo que “les ha pasado factura”.

El excandidato socialista ha explicado que todas las elecciones tienen “un vencedor que no siempre coincide con quien gana matemáticamente” y ésta victoria política hace que los partidos suban en las encuestas. En su opinión, eso es lo que pasó con Podemos tras las elecciones europeas y con Ciudadanos tras la cita catalana.

“Me hizo mucha gracia en la noche de las elecciones catalanes escuché a Pablo Iglesias dando un discurso y dijo: 'Hemos pagado el precio de la responsabilidad', y yo pensé para mí: 'Bienvenidos a la realidad'”, ha resaltado.

Con todo, ha subrayado que la Presidencia del Gobierno se va a jugar entre Pedro Sánchez y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, porque en las elecciones generales va a pasar “como en la Liga de fútbol”, “hay dos equipos que se disputan el primer puesto y otros que se fueran el tercero”. “Uno de los dos va a ganar, Sánchez o Rajoy, pero es cierto que cuatro formaciones políticas van a jugar en este Parlamento del futuro”, ha añadido.

Preguntado por lo que piensa de los posibles pactos del PSOE con estas formaciones, ha incidido en que los pactos se deben dejar para después de las elecciones porque “los ciudadanos deciden también los pactos” cuando votan, puesto que dibujan “un tablero” en el que los partidos tienen que moverse. Así, ha defendido que lo “más respetuoso para la democracia es que cada uno defienda lo suyo”.