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Medio Ambiente: García Tejerina es la encargada de que España cumpla en la lucha contra el cambio climático

Continuidad absoluta en Medio Ambiente. La encargada de que España cumpla su parte en la lucha contra el cambio climático seguirá siendo Isabel García Tejerina. El Ministerio vuelve a llevar por delante la agricultura, la pesca y la alimentación. Hasta ahora, la política ambiental del Gobierno de Mariano Rajoy no ha puesto muchas trabas a la agenda económica en virtud de la protección del entorno.

Frenar el efecto invernadero

Con García Tejerina al frente España debe ratificar el Acuerdo de París sobre lucha contra el cambio climático. Todavía no lo ha hecho. Sí dio el visto bueno a que lo hiciera la Unión Europea en conjunto para que el acuerdo pudiera entrar formalmente en vigor este 4 de noviembre.

Los compromisos de recortes en las emisiones de gases deben funcionar en 2020. El reto es implementar los compromisos para que esas reducciones sean efectivas. De momento, tanto este año como el anterior, España ha vuelto a aumentar la cantidad de gases de efecto invernadero lanzados a la atmósfera en un 8 y un 3% respectivamente.

Plan pendiente contra el ozono

Relacionado con la calidad del aire, España debe lidiar con la contaminación atmosférica. Las concentraciones de dióxido de nitrógeno provenientes del tráfico son ilegales en Madrid y Barcelona. El 20% de la población respira aire con exceso de ozono, de acuerdo con la normativa ambiental. Sin embargo, el Ministerio de Medio Ambiente tiene pendiente elaborar un plan específico que aborde este contaminante.

España está a la cola en impuestos verdes. Su media es de 1,8% del PIB por un 2,4% de media en la Unión Europa Un instrumento para proteger el entorno con el principio de quien ensucia paga. Una fórmula que busca desincentivar las actividades económicas más lesivas con el medio. Hasta la OCDE ha solicitado a España que incida en este camino en el que solo Lituania y Eslovaquia van más rezagados. Ni Mariano Rajoy ni García Tejerina se han dado, hasta ahora, por enterados.

Mala conservación de los entornos

Y es que el estado español es el que más sanciones europeas en cuestión medioambiental va acumulando. Un síntoma de la política verde. Sin ir más lejos, dos tercios de los hábitats declarados oficialmente prioritarios están en mal estado de conservación, según el análisis del propio Ejecutivo. Son la base de la Red Natura 2000 de espacios protegidos amparada por la UE.

Espacios como el Parque Nacional de Doñana cuyo deterioro ha hecho que la Unesco pida a España una respuesta antes de decidir si se declara como patrimonio de la humanidad en peligro. El Gobierno debe remitir su informe en diciembre de este año. Doñana es considerado un pilar básico de la naturaleza mundial a la altura de la Amazonía o la Gran Barrera de Coral.

Lidiar con la guerra del agua

También tendrá que gestionar el Ministerio el tema el agua. Con el deterioro del Tajo y su trasvase hacia el sureste. Con el estuario del Guadiana con escasez y el delta del Ebro perdiendo aportaciones constantemente. Y sacar adelante un plan de salvación para el Mar Menor que se cuece en contaminación derivada de los vertidos humanos.

Además, este departamento deberá decidir si continúa sacando la cara por el sector cinegético a pesar de que está costando tirones de orejas por parte de la Comisión Europea. Bruselas no pasa más por alto la caza de pájaros cantores y prepara una nueva legislación sobre el uso de la munición de plomo.