El copiloto ocultó a Germanwings que estaba en tratamiento y de baja por enfermedad
La Fiscalía alemana que investiga el caso del avión de Germanwings que se estrelló en los Alpes franceses ha informado este viernes de que han encontrado documentos que muestran que el copiloto, Andreas Lubitz, estaba recibiendo tratamiento médico y que este ocultó a su empresa su enfermedad.
El copiloto tenía un certificado médico de baja por enfermedad, que había roto y ocultado a la empresa, así como otros documentos que demuestran que estaba en tratamiento. Varios medios subrayan que los investigadores encontraron la baja hecha trizas en una papelera de la casa de Lubitz.
Fuentes de la Fiscalía han precisado que se tardará unos días en analizar los documentos hallados en la vivienda del copiloto, al que se acusa de haber estrellado intencionadamente el aparato. Der Spiegel asegura que los investigadores ya tenían evidencias de que el copiloto sufría una enfermedad mental.
Fuentes de la Fiscalía negaron, en cambio, que en los registros realizados en su domicilio se hubiera encontrado una carta de despedida. Tampoco material político o religioso que pudiera apuntar otro tipo de motivos.
El presidente de Lufthansa, Carsten Spohr, dijo en una rueda de prensa el jueves que Andreas Lubitz había interrumpido su formación como piloto hace seis años por una baja médica, aunque no especificó los motivos. Spohr subrayó que a su vuelta Lubitz había superado todas las pruebas para convertirse en piloto.
De acuerdo con los diarios Bild y Frankfurter Allgemeine Zeitung, que se remiten al entorno del copiloto, las razones por las que Andreas Lubitz, de 27 años, interrumpió su formación en 2009, se debieron a una grave depresión, según se le diagnosticó entonces.