Expertos en farmacia han defendido hoy una Estrategia Nacional de Atención Domiciliaria que incluya la atención farmacéutica con criterios básicos y comunes para toda España, y que esté liderada por las autoridades sanitarias.
Este planteamiento se ha puesto sobre la mesa en el curso “Atención domiciliaria: continuidad asistencial”, que hoy y mañana se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander, organizado por el Instituto de Formación Cofares (IFC) y dirigido por el experto en sanidad Julio Sánchez Fierro.
Sánchez Fierro, vicepresidente de la Asociación Española de Derecho Sanitario, ha apostado por una Estrategia Nacional de Atención Domiciliaria en la rueda de prensa que sobre este curso ha ofrecido con el presidente de Cofares, Eduardo Pastor, y la presidenta del IFC, Yolanda Tellaeche.
En el curso se han presentado datos sobre el envejecimiento de la población y el aumento de los enfermos crónicos y los dependientes.
En la actualidad, en España, casi tres millones de personas superan los 80 años, mientras que la población de más de 65 años es el 19 por ciento, cifra que en 2050 se elevará al 36 por ciento.
En la presentación del curso se expone que “la atención domiciliaria cobrará un protagonismo creciente, al tiempo que su coordinación con los diferentes niveles asistenciales darán lugar a reformas para reorientar y poner a punto el sistema sanitario”.
Eduardo Pastor ha deseado suerte a la nueva ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, tras la dimisión ayer de Carmen Montón, y ha admitido que su dimisión puede complicar la toma de medidas que espera y necesita el sector farmacéutico y sanitario.
Sánchez Fierro, quien ha desempeñado diferentes cargos en el Ministerio de Sanidad, ha pedido a los poderes públicos que sitúen en la agenda política la sanidad como tema relevante, con prioridad en los presupuestos, para evitar problemas de financiación.
El director del curso ha añadido en este sentido que “las circunstancias políticas no son irrelevantes, pero hay que trabajar más allá de los ciclos políticos”.
“La atención domiciliaria no es una moda en España, está muy rodada en los países anglosajones y en el norte de Europa, aunque menos en el sur, pero tenemos que hacer frente a este déficit. Sería irresponsable en lo político e institucional no afrontar este problema”, ha subrayado.
Sin un planteamiento de actuaciones concretas, Sánchez Fierro ha pedido medidas regulatorias y ha precisado que la atención domiciliaria debe contar con la voluntariedad tanto de los farmacéuticos como de los pacientes y sus familiares.
Respecto a las diferencias que puede haber respecto a la atención domiciliaria entre la enfermería y la farmacia, Eduardo Pastor ha defendido el diálogo y el acuerdo: “Animo a unos y otros a ponerse de acuerdo, apuesto por el consenso; el objetivo es el paciente y lo mejor para ellos”.
A este respecto, Yolanda Tellaeche ha añadido: “Los mayores nos piden que haya un acuerdo, que nos entendamos, y tenemos esa responsabilidad. Yo tampoco veo enfrentamiento en la actividad diaria”.
Tanto Pastor como Sánchez Fierro y Tellaeche han remarcado la necesidad de un acuerdo de todo el sector sanitario, médicos, enfermería, farmacia, pacientes, psicólogos,fisioterapeutas, sociedades médicas, desde el impulso de las autoridades sanitarias sobre la atención domiciliaria.
En el curso participarán esta tarde y mañana, representantes de las sociedades de geriatría y gerontología, la Conferencia Española de Alzhéimer (Ceafa), el Foro Español de Pacientes, y el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), para ofrecer su visión sobre la atención domiciliaria.