Golpe a la homeopatía en su principal mercado: las autoridades sanitarias francesas recomiendan dejar de financiarla por su falta de eficacia
La Alta Autoridad para la Salud de Francia (HAS, por sus siglas en francés) ha decidido este miércoles, por amplia mayoría, recomendar al gobierno francés que elimine la subvención de los productos homeopáticos, debido a su falta de eficacia demostrada. Esta decisión, que ha sido adelantada por el diario francés Libération, supone un duro golpe para esta pseudoterapia en el seno de la UE, ya que Francia es uno de los mayores mercados de la homeopatía a nivel mundial y ha sido uno de sus mayores defensores dentro de la unión.
La polémica se inició el pasado año, cuando la HAS afirmó estar “sorprendida” por el mantenimiento de subvenciones del 30% a los productos homeopáticos, “similar a la de medicamentos que han demostrado eficacia”. Pocos meses después, la ministra de Sanidad francesa, Agnès Buzyn, solicitó a este organismo que investigase la eficacia de la homeopatía, para decidir si mantenía la subvención.
El debate se ha recrudecido desde entonces y las academias nacionales de medicina y farmacia emitieron un comunicado el pasado mes de marzo asegurando que “ninguna preparación homeopática debe ser reembolsada hasta que se haya demostrado la existencia de un beneficio médico suficiente”. Frente a la comunidad científica, las principales empresas farmacéuticas del sector, como Boiron, Lehning y Weleda, se unieron para pedir unas pruebas de eficacia especialmente diseñadas para ellos, asegurando que los medicamentos homeopáticos no pueden ser evaluados como los convencionales, algo que la HAS rechazó.
En su dictamen provisional, aprobado a mediados del pasado mes de mayo, el organismo público ya abogaba por la suspensión del reembolso de estos productos y, finalmente, tras una votación celebrada el pasado miércoles, se confirmó el dictamen, con solo un voto en contra. Aunque la decisión deberá ser confirmada por Buzyn, el Ministerio de Sanidad francés siempre sigue las recomendaciones de la HAS y la propia ministra ya declaró recientemente que aceptaría la el dictamen de la comisión.
Ni subvención, ni títulos universitarios
De confirmarse la suspensión del reembolso, la homeopatía perdería uno de sus principales mercados a nivel mundial, ya que Francia mueve más de 600 millones de euros en productos homeopáticos. El golpe será especialmente duro para la farmacéutica francesa Boiron, la mayor multinacional de homeopatía del mundo, que factura cerca de 360 millones de euros en el país galo, un 60% de su facturación global. Tras la publicación de la decisión de la HAS, la empresa ha pedido al regulador del mercado de valores que suspenda la cotización de las acciones de la compañía.
El impacto de esta decisión no solo será económico, dado que la homeopatía también podría perder parte del soporte académico que tenía en el país. Tras el inicio del proceso de evaluación el pasado año, varias universidades francesas anunciaron la suspensión de sus cursos de homeopatía a la espera de que se produjera el dictamen oficial. La decisión venía respaldada por las academias de medicina y farmacia, que aseguraron que “ningún título universitario en homeopatía debe ser expedido por facultades de medicina o farmacia”.
Francia se alinea así con países como Reino Unido, donde el Servicio Nacional de Salud decidió dejar de financiar la homeopatía en 2017, asegurando que los contribuyentes no deberían pagar por “agua del grifo disfrazada de medicina”. España, que nunca ha financiado este tipo de productos, ha ido incluso un paso más allá y está elaborando un proyecto para sacar las pseudoterapias de las universidades y los centros sanitarios.
La posición de estos países sigue las recomendaciones de la comunidad científica internacional, que en los últimos años ha insistido en la falta de eficacia probada de esta pseudoterapia. En este sentido, el Comité Científico Asesor de las Academias Europeas publicó en 2017 un informe en el que asegura que “no existen enfermedades conocidas para las cuales exista evidencia robusta y reproducible de que la homeopatía sea eficaz más allá del efecto placebo” y advierte de que el consumo de homeopatía “puede suponer un daño significativo para el paciente”.
La CE se resiste a modificar la ley
La decisión de la HAS también supone la pérdida de un aliado estratégico dentro de la UE, donde la homeopatía ha ido perdiendo importantes apoyos durante los últimos años. Además, se produce en un momento en el que cada vez surgen más voces que ponen en cuestión la actual legislación europea que regula estos productos y que está diseñada a medida de la industria de la homeopatía, ya que permite comercializar los preparados homeopáticos como medicamentos sin tener que demostrar eficacia.
El debate lo inició España el pasado año, cuando trasladó a la Comisión Europea (CE) una petición para modificar la normativa actual y que se deje de reconocer como medicamentos a aquellos productos que no demuestren eficacia. Sin embargo, el pasado mes de diciembre la CE rechazó esta petición y el comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, respondió al eurodiputado español José Blanco que no había recibido “solicitudes similares de otros Estados miembros para que se modifique la legislación actual sobre los medicamentos homeopáticos”, por lo que no tiene previsto evaluar ni modificar dicha legislación.
A pesar de que, tal y como señala el comisario Andriukaitis, ningún país se ha sumado oficialmente a la petición de España, la más que probable decisión de Francia de dejar de financiar la homeopatía por su falta de eficacia supone un cambio importante en el escenario europeo y añade más presión a la comisión para cambiar una norma que es rechazada por la comunidad científica.