Trece universidades se suman al referéndum sobre el rey: “Queremos que de aquí salga un movimiento estudiantil fuerte”
Empezó con una decena de estudiantes sentados en un césped de la Universidad Autónoma de Madrid. Pasaron a ser 40 en el salón de actos de la Facultad de Filosofía en la primera asamblea. Comenzaron a llegar correos de otros centros. La Universidad Carlos III, también de Madrid, la de Zaragoza. Se unió un grupo de estudiantes catalanes de la Pompeu Fabra y la Universidad de Barcelona. Llamaron de Vigo, de Asturias. La última en unirse ha sido la de La Laguna, en Tenerife.
Hasta este jueves son 13 las universidades que van a celebrar referendos sobre la monarquía y el modelo de estado. Obvio que son consultas simbólicas, a imagen de las que se están celebrando o van a celebrar en diferentes barrios y pueblos de España, pero están cumpliendo con el objetivo que se han marcado incluso antes de celebrarse: agitar el debate.
“Se está extendiendo rapidísimo. Somos diez en este momento, pero estamos en contacto con otras y no descarto que según hablamos se una alguna más”, cuenta Lucía Nistal, portavoz de la Plataforma de la UAM y una de las personas que dio origen a todo el movimiento en ese césped de Cantoblanco.
“Está teniendo bastante eco en la universidad”, responden de manera similar los portavoces de algunos de los centros que van a realizar las consultas sobre el interés suscitado en sus campus. De hecho, al poco de anunciarse la primera consulta un grupo de varias decenas de profesores emitió un comunicado apoyando la iniciativa, que calificaron de “oportuna”. Los apoyos han venido desde los sitios más variopintos, como los trabajadores en lucha de Amazon. Para los portavoces estudiantiles, esto respalda su versión de que hay una demanda social de realizar esta consulta.
“El régimen planta un candado sobre una institución heredera del franquismo, que nos metieron como un pack con la Constitución, reaccionaria y que solo el 20% de la población en edad de voto ha podido elegir”, cuenta Jorge Remacha, estudiante de Historia y portavoz de la Plataforma Referéndum UNIZAR.
“Lo que nos parece muy potente de la iniciativa es que vuelve a poner sobre la mesa en debate un tema que estaba latente, pero no tanto en el foco”, explica Pablo Acedo, estudiante de Filosofía, Política y Economía en la Universidad Pompeu Fabra y portavoz de la plataforma catalana Fora el Borbó de les universitats catalanes.
Para las diferentes plataformas, el referéndum es solo un medio, no un fin en sí mismo. Aspiran a más, quizá a que cristalice en una agrupación de estudiantes a nivel nacional. “Son solo el primer paso. Tenemos la idea de que de aquí salga un movimiento estudiantil fuerte, que se una a otros sectores como el potente movimiento de mujeres, los precarios, migrantes, etc”, cuenta Nistal, de la UAM.
“Si pensamos en lo que viene después, lo enfocamos a la autoorganización estudiantil, a asambleas masivas, a que se unan institutos, universidades, profesores, trabajadores. Esto va más por el tema de una lucha conjunta y la organización social a que la universidad haga algo con el resultado del referéndum”, reflexiona Acedo, de Fora el Borbó.
“Queremos impulsar un cambio verdadero y caminar hacia un proceso constituyente, aunque hoy por hoy lo vemos lejos por cómo está la situación política. Pero sí nos gustaría unirnos al resto de universidades y articular un movimiento”, añade Del Barrio, de la UCM-UPM, que también realiza, “a título personal”, una reflexión: “Creo, y bastantes compañeros conmigo, que el movimiento estudiantil ha estado un poco parado [estos últimos años]. Ahora nos mueve la posibilidad de ilusionar a estudiantes, jóvenes en general y a todo el que se quiera unir para crear un movimiento potente en base a los valores republicanos y democráticos”.
La cuestión de los procesos constituyentes es especialmente relevante para la plataforma catalana. “Consideramos que aquí hay un desarrollo diferente en el tema monarquía/república que en el resto del estado por el 1-O, las reprobaciones al rey, etc.”, explica Acedo. “En ese contexto, consideramos que la primera pregunta de la consulta habla sobre monarquía o república y la segunda, sobre abrir un proceso constituyente, puede incluir el derecho de autodeterminación”, añade.
Aunque la idea es que el referéndum sea abierto a todas las opciones y la organización espera que cada uno defienda lo suyo, las plataformas no serán neutrales, según explica Pablo del Barrio, de la UCM-UPM. “La plataforma es republicana. Evidentemente, todo el mundo está llamado a votar, pero nosotros hacemos campaña por la República”, cuenta.
