Sanidad busca tener listos los 'tests rápidos' para leves “inmediatamente” y advierte de que alterarán las estadísticas
El Ministerio de Sanidad ya anunció ayer que estaba trabajando en un nuevo sistema de diagnóstico de coronavirus que llegase a más cantidad de población, también a los casos leves. En rueda de prensa tras la reunión de los responsables técnicos de la crisis, Fernando Simón, desde Sanidad, ha comunicado que está activo un “despliegue” entre gobierno central y comunidades para poner en marcha esos “tests rápidos” “inmediatamente. No puedo decir si mañana, o pasado”. Se está recopilando ya el material necesario, ha avanzado.
Se está haciendo un “gran esfuerzo” para extender esos tests rápidos a más población con sintomatología. Los describen como “un gran avance en el diagnóstico precoz” de la enfermedad Covid-19, y aplicarlos sigue las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, ha recordado que, para llevarlo a cabo, tienen un “rol fundamental” los servicios de atención primaria, que harían el seguimiento de casos a domicilio. El número de contagiados confirmados ha superado en España hoy los 13.700, un 18% más que ayer. Hay 774 pacientes en la UCI, 1.081 recuperados y 598 han fallecido.
La semana pasada, ante el colapso de personas con síntomas que solicitaban someterse a las pruebas, el Ministerio cambió el protocolo y dejó de hacérselas a personas con sintomatología leve que pudiesen pasar la Covid-19 en sus casas sin necesidad de traslado hospitalario. El protocolo se cambió porque la “urgencia” era y sigue siendo, al margen de tener confirmado el positivo, que esas personas, si lo pasan sin mayores complicaciones, se aíslen y no contagien a nadie más. Pero al no contabilizarlos, el número de contagios oficial puede estar infravalorado.
Con esta intención de volver a cambiar el procedimiento, el Ministerio sigue la indicación que hizo el lunes la OMS: pidió, en su rueda de prensa rutinaria, que se hagan cuantos más test mejor a la población. Lo trató como un punto clave en esta fase de la pandemia con la idea de detectar, aislar y hasta rastrear contactos de esos casos (para que se aíslen también). Simón ha explicado que, para poder cumplirlo, buscan “mecanismos para recuperarnos de problemas presentados los últimos días”, como ese retraso y colapso.
Al principio de la epidemia sí se contabilizaban los casos leves. Al eliminarlos, es más complicado calcular la tasa de letalidad y de personas ingresadas en UCI, así que esto ayudará a dibujar mejor el mapa de la incidencia del coronavirus en España. Pero la nueva modificación generará una alteración en las estadísticas, puesto que aumentarán a partir de ese momento los casos conteados. Por eso, Fernando Simón advertía de que “no tenemos claro cuánto van a poder incrementar los casos” una vez aplicados los 'tests rápidos', y “tendremos que explicar con cuidado el impacto en el incremento de esta evolución”.
Es decir, “si se incrementan las pruebas rápidas, habrá muchos más casos leves”. “Bajará el porcentaje de gente en la UCI y hospitalizada”, así que habrá que seguir fijándose en cómo aumenta o disminuye la gente que requiere ingresos “en número bruto” para valorar bien todos los aspectos de la curva. Además, ha seguido Simón, “vamos a tratar de que los primeros tests se hagan a una muestra representativa de poblaciones de interés”, también con el objetivo de “valorar la transmisión en la comunidad, si ha estado diseminada o no”.
El material necesario para los 'tests rápidos', ha dicho Simón, se está gestionando “progresivamente”, y se tiene que validar en el Centro Nacional de Epidemiología. Actualmente, el protocolo de Sanidad solo hace pruebas a personas con cuadros clínicos graves, a personas de grupos vulnerables “independientemente de su gravedad”, y a personal sanitario, por el contacto con personas frágiles a las que les puede transmitir la enfermedad.
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