España conmemora mañana el Día Europeo de la Protección de Datos, una jornada que este año marcará el pistoletazo de salida para la concienciación de una nueva cultura de la privacidad, que despuntará en mayo con la entrada en vigor de un reglamento que cambiará las reglas de juego en la UE.
Administraciones, organizaciones y asociaciones aprovecharán esta jornada impulsada por el Consejo de Europa y que se celebra desde hace más de una década cada 28 de enero, para insistir en los riesgos que implica para el ciudadano no proteger su información en un entorno de explosión de datos y tecnologías cada vez más sofisticadas para analizarlos.
La jornada de la Protección de Datos es especial este año dada la inminente entrada en vigor el próximo 25 de mayo del novedoso Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la Unión Europea (UE), que será de obligado cumplimiento para todos sus Estados miembros.
Esta normativa marcará el inicio de una nueva cultura de la privacidad. En el caso de España, la Ley Orgánica de Protección de Datos deberá adaptarse al nuevo marco normativo europeo, y actualmente el proyecto de ley está en fase de tramitación parlamentaria.
Según la directora de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), Mar España, dicha iniciativa plantea puntos novedosos y útiles para el ciudadano, como el reconocimiento del derecho a acceder, rectificar o cancelar los datos de un fallecido o la necesidad de una deuda mínima de 50 euros para que los datos de una persona puedan incluirse en un fichero de morosos.
Sobre el reglamento europeo de Protección de Datos, la directora de la AEPD destaca derechos incluidos para reforzar el control por parte de los ciudadanos de sus propios datos, como el de portabilidad de los datos personales.
Así, explica, cualquiera que haya facilitado información a empresas como redes sociales, podrá solicitarles la recuperación de sus datos e incluso llevarlos a otras plataformas cuando sea técnicamente posible.
Las asociaciones de internautas advierten de que la gestión de la privacidad en el mundo digital sigue siendo un gran reto.
La capacidad de gestión de los datos con las tecnologías actuales genera “zonas de penumbra” que pueden afectar a la intimidad y a la privacidad, advierte el presidente de la Asociación de Internautas (AI), Víctor Domingo.
Hay que ser precavido en internet, explica, tras destacar las ventajas del uso de sistemas tipo “escudo” ante grupos vulnerables como los menores en internet o informarse sobre los dispositivos y tecnologías para la seguridad.
“En general, desconocemos los riesgos relacionados con la protección de nuestros datos personales”, advierte por su parte el presidente de la Asociación de Usuarios de Internet (AUI), Miguel Pérez Subías.
“No somos conscientes de la cantidad de datos que genera el uso de las tecnologías y de cómo eso puede afectar a nuestros derechos fundamentales”, añade.
La AUI ha aprovechado la jornada que se celebrará mañana a nivel internacional y que fuera de Europa se denomina Día de la Privacidad, para lanzar “www.estudiodeprivacidad.com”, una iniciativa para aportar conocimiento del comportamiento de los usuarios ante la publicidad y viceversa.
Su presidente, Miguel Pérez Subías, ha informado además de que el Comité de Impulso del Día de Internet centrará este año su debate anual en las implicaciones sociales de la sociedad de los datos.
La Asociación Profesional Española de Privacidad (APEP) asegura en una nota que la nueva normativa europea sobre protección de datos revolucionará el tejido empresarial y administrativo español con “una nueva cultura de la privacidad”.
Según la Asociación Española para la Digitalización, DigitalIES, La protección de la privacidad supone un reto para la prestación de los servicios digitales tanto privados como públicos.
Ésta deberá conciliarse con el desarrollo de una industria digital europea capaz de atender la demanda de servicios más personalizados que faciliten la vida al ciudadano y que exigen un tratamiento de sus datos.
El ingeniero Enrique Puertas, profesor de la Universidad Europea, en el Departamento de Ciencia, Computación y Tecnología ha advertido de que en torno al 50 por ciento de las empresas, sobretodo pymes, no están preparadas para adaptar sus sistemas a la nueva regulación de protección de datos.