Utilizar el móvil para enviar fotos es tan habitual que cuesta creer que hace unos años no fuera posible. Los momentos importantes, y los no tanto, ahora quedan inmortalizados a través de un sencillo gesto: desbloquear el smartphone, abrir la cámara, hacer la foto y subirla a redes sociales. Pero ¿quién fue el pionero?
La versión más aceptada es la de Philippe Kahn, quien supuestamente inauguró la comunicación instantánea de imágenes el 11 de junio de 1997 tras compartir una fotografía de su hija recién nacida. Para ello, Kahn hizo capturó el momento con una cámara digital, la pasó a su ordenador portátil y la envió al ordenador de su casa utilizando la señal del móvil para transferir los datos.
El ingeniero se puso a trabajar en el nuevo invento desde la misma sala del hospital en el que tomó la foto de su bebé. La experiencia de Philippe como presidente de Borland, una compañía de software que compitió con Microsoft, permitió que más tarde fundara su propia delegación especializada en comunicaciones inalámbricas y sincronización entre dispositivos: Starfish Sofware.
Aunque la historia de Philippe es una anécdota idílica para marcar el inicio del primera imagen enviada gracias a un móvil, lo cierto es que existen antecedentes que impiden catalogarla como un hecho pionero en el mundo de la tecnología. Por tanto, a pesar de que Kahn incluso fue protagonista de un anuncio de la Super Bowl donde se autodefinía como el creador de la cámara en teléfonos móviles, lo que hizo fue ayudar a desarrollar una idea ya pensada con anterioridad.
Como apuntan en Cnet, en 1994 Olympus había desarrollado la Deltis VC-1100, una cámara que ya permitía la posibilidad de utilizar la línea telefónica para transferir fotos digitales.
Se trataba de un sistema muy primitivo, en el que había que esperar hasta 6 minutos para transmitir una fotografía y conectarse a internet, pero lo importante es que ya se había dado el paso hacia lo que más tarde conoceríamos como comunicación de imágenes instantánea.
No obstante, todavía hay que retroceder más en el tiempo para encontrar la idea original del invento. En Cnet hablan de cómo a principios de 1990 ya existía una patente por Alcatel que hablaba de incluir cámara en los teléfonos móviles, algo que erróneamente se atribuye a Philippe Kahn.
Además, el propio Khan reconoce que no llegó a crear un único dispositivo unificado que pudiera ser concebido como un móvil con cámara, sino que se trataban de diferentes gadgets que operaban entre sí para lograr enviar la fotografía. Esta idea entronca directamente con la actual concepción del servicio y, por ello, marcarlo como el origen de dicha tecnología podría estar sujeto a discusión.
Teléfonos con cámara para el nuevo milenio
Para encontrar primer móvil con cámara del mercado habría que esperar a la llegada del J-SH04, realizado por Sharp en noviembre del año 2000. El teléfono fue lanzado solo en territorio nipón por la compañía multinacional de comunicaciones SoftBank, pero rápidamente se popularizó y a los pocos meses fue sustituido por una nueva versión que corregía algunos detalles.
Aun así, la batalla por colgarse la medalla de la primera empresa en añadir cámara a un teléfono no había terminado. Según indican en GSM History, Samsung también pretendía catalogarse como pionero. La compañía surcoreana argumentó que el Samsung SCH-V200, anunciado en junio del 2000, debería ser considerado como el primer móvil del sector capaz de captar imágenes.
El liderazgo continuó perteneciendo a Sharp, ya que el de Samsung incorporaba una cámara pero funcionaba de forma independiente al teléfono. No se trataba entonces de un dispositivo unificado, sino de un móvil y una cámara de mala calidad que trabajaban por separado.
Posteriormente, Nokia lideraría los avances de fotografía en el ámbito móvil. El modelo 7610 fue el primer teléfono en incorporar cámara con un megapíxel, una resolución que permitió obtener imágenes más nítidas y con muchos más detalles, especialmente comparadas al resto de opciones disponibles. Versiones posteriores, como N82, N95 o 808, confirmaron que Nokia era por entonces el fabricante de móvil que más dedicación ponía en la fotografía.
La verdadera explosión de la comunicación visual en móviles está ligada al auge de las redes sociales y los smartphones. Ahora, dispositivos como el iPhone 7 o Samsung Galaxy S8 permiten obtener una calidad que, en muchos casos, incluso puede ser comparada con la de una cámara fotográfica profesional. Esto ha provocado el declive de ventas y producción en un sector que, hasta no hace demasiado tiempo, solo estaba ocupado por empresas como Nikon o Canon.
La primera imagen compartida con un teléfono no tiene un claro protagonista e incluso hoy sigue generando polémica sobre un hecho que, como Philippe Kahn intuyó tras el nacimiento de su hija, marcó una revolución tecnológica.