Reseña del ZTE Skate Pro, un smartphone económico

ZTE suena a chino. Para la mayoría de consumidores esta empresa es casi una desconocida. Efectivamente, ZTE es china y es capaz de producir un teléfono de alta calidad como el Nubia Z5 junto a otro de gama media-baja, como el Skate Pro que vamos a repasar punto por punto en este análisis.

La oferta tecnológica es tan grande como los grupos de clientes a los que tratan de llegar. ¿Es acaso necesario que cualquier usuario se haga con el producto más potente y caro? Si no va a exprimirlo podría decirse que está realizando una mala compra. El avance en el cuidado de los detalles de los teléfonos de gama media y baja ha permitido que sean productos competitivos, siempre a tener en cuenta.

Es lo que ocurre con este ZTE Skate Pro, un smartphone sencillo pero bastante completo que Movistar comercializa por 180 euros.

Experiencia de usuario

Quizá por clasificarlo en esa categoría, la primera impresión con el ZTE Skate Pro es muy buena. Su aspecto es elegante gracias al marco cromado que encierra una pantalla de 4 pulgadas con borde negro. Este modelo recupera el estilo de cuatro botones hápticos en la parte frontal inferior, más cómodo para los usuarios menos experimentados que no se aclaran con las funciones ocultas y las pulsaciones prolongadas.

La pantalla es mejor al tacto que a la vista. Está cubierta por una capa de cristal endurecido que invita a tratarla sin cariño ni miedo pero no le resta un ápice de sensibilidad. La parte mala, más allá de no ofrecer alta resolución, es que le falta potencia de iluminación y provoca reflejos incluso cuando está encendido. Tampoco tiene un gran ángulo de visión, lo que le convierte en un aparato más unipersonal si cabe.

Las buenas sensaciones físicas continúan por la parte trasera. La tapa, de plástico como toda la carcasa, tiene un tacto suave a goma que garantiza un buen agarre. Es completamente lisa a excepción de un óvalo metálico en el que espera la cámara de 5 megapíxeles, sin flash. Tampoco tiene cámara frontal. Y un detalle de agradecer: tanto la tarjeta de memoria como la tarjeta SIM se colocan y se retiran con mucha facilidad.

El ZTE Skate Pro ha perdido tamaño en comparación a su predecesor. Lo ha hecho sacrificando 0,3 pulgadas de imagen para conseguir un aspecto más robusto, estilo y unas dimensiones totales más apropiadas al tamaño de su pantalla. Este es mucho más cómodo en la mano de un adulto aunque algo pesado para sus dimensiones.

Interfaz de usuario

Debajo de esa carcasa esconde una CPU Cortex A5 a 1GHz y una GPU Andreno 200. Con sus 512 MB de RAM tiene suficiente para tirar con la mayoría de aplicaciones, tanto las genéricas como las extraordinarias. El sistema operativo es Android 4.04 Ice Cream Sandwinch pero llegó con la promesa de que será posible actualizarlo al menos a Android 4.1 Jellybean.

Sin ser un teléfono rápido, sí es eficiente. Le cuesta un poco encenderse pero una vez en marcha gestiona con facilidad las aplicaciones sin ralentizaciones de imagen al abrir ni cerrar, ni cuelgues. Todo lo hace con fluidez, aunque con cierto lag o retraso desde que se da la orden hasta que la ejecuta. Quizá la ROM de Movistar sea una lacra como ocurre en la mayoría de dispositivos Android.

Llega a sorprender la soltura con la que trabajan Google Maps y Navigation en combinación con el GPS, por poner un ejemplo. Carga los mapas casi al vuelo, ya sea conectado a una red de datos 3G estable o mediante WiFi. No le va tan bien cuando se trata de juegos 3D, que son más exigentes con el hardware. Cuando empiezan a pasar muchas cosas a la vez en pantalla sí pierde estabilidad en la imagen, eso sí, sin sufrir calentamiento.

Navegando por Internet y por YouTube se las apaña bastante bien. Una vez más, lento al cargar pero fluido al funcionar. Como buen Android, soporta Flash Player. El teclado, por el contrario, es incómodo.

Prácticamente toda la apariencia de la interfaz de usuario es la genérica de esta versión de Android, una buena señal por su usabilidad. Aparte, ZTE carga funciones extra como un menú de desbloqueo que es a la vez un distribuidor de aplicaciones configurable, perfecto para lanzar directamente la que seleccionemos.

Tiene una buena gama de apps instaladas que le dan una valoración extra como antivirus, ordenación de archivos, copia de seguridad, varios reproductores e incluso un paquete de ofimática con lector de documentos Office y PDF. Como no siempre se cumple que “cuanto más, mejor”, Movistar le ha metido todo su paquete de aplicaciones que empeoran el rendimiento y no pueden ser desinstaladas fácilmente.

Es imprescindible mencionar que también incluye la función WiFi Direct que permite utilizar el móvil como router al que se conectan otros equipos para utilizar, por ejemplo, su conexión a Internet 3G.

Cámara de fotos y vídeo

Cámara de fotos y vídeoHasta el momento hemos visto que estamos ante un teléfono capaz de hacer muchas de las cosas que hacen los teléfonos de gama alta, aunque con más discreción. Pero aquí llega el punto de ruptura.

Si eres ese tipo de persona que espera dejar la cámara en casa gracias al móvil, el ZTE Skate Pro no es tu teléfono. Sus 5 megapíxeles no son garantía de buenas imágenes. El resultado es mediocre en el mejor de los casos, es decir, cuando se toman con buena iluminación y estabilidad. El zoom automático solo consigue reducir la nitidez de la imagen, ya de por sí poco definida, y las opciones de configuración, muy básicas, no consiguen solventarlo.

Además, no tiene flash con el que suplir la falta de luz ni tampoco una cámara frontal para realizar videoconferencias.

Batería y tiempo de carga

Batería y tiempo de cargaSi se puede sacar algo positivo de esa falta de potencia es que de ese modo consume menos batería. La del Skate Pro es algo superior a la que suelen incorporar los móviles de su gama, de modo que se convierte en una alternativa más eficaz.

En unas cuatro horas la carga está completa y dura sin problemas un día entero haciendo un uso estándar de él: media hora de llamadas, consulta de correo y de chat constante, una hora de navegación, etc. Si se le da un uso básico pero real se puede ir hasta los dos días sin cargar y en el extremo de utilizarlo sin parar se queda en unas seis horas.

Conclusión

ConclusiónSu diseño renovado, su actualización a Android Ice Cream y su precio son lo mejor de un ZTE Skate Pro competente, capaz de satisfacer esas nuevas “necesidades básicas” de comunicación sean del nivel que sean. El gran pero es la cámara que no va a contentar ni a quienes la usan para dejar la buena en casa ni a quienes la quieren para pasar el rato.

Tras unos días con él te acabas acostumbrando a sus limitaciones de funcionamiento. Es un buen teléfono para dar el salto a los smartphones sin sentir que estás invirtiendo en un aparato repleto de funciones que no necesitas. Está muy lejos de competir con los grandes pero es un duro rival para los de gama media alta.

Especificaciones técnicas

Especificaciones técnicas