Google recurrirá al Tribunal Supremo de Justicia de Francia después de que el pasado mes de marzo, la agencia de protección de datos del país galo (CNIL) ordenase que el derecho al olvido no solo debía interpretarse a nivel nacional, sino también en el resto del mundo. Kent Walter, vicepresidente de la compañía así lo ha indicado hoy en un comunicado.
La CNIL dictó en marzo que, en base a la ley francesa, Google debía garantizar el derecho a desaparecer de los resultados de búsqueda a los ciudadanos de todo el mundo, no solo a los franceses. La sentencia de derecho al olvido fue dictada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en 2014, y permite a todos los europeos “borrarse” de los resulados que aparecen en todos los motores de búsqueda y que incluyen sus datos personales.
“Google cumple con esta sentencia del Tribunal Europeo en todos los países de la Unión Europea”, dice Walter en el comunicado. En mayo del año pasado, la compañía que preside Sundar Pichai anunció que doce meses después de entrar en vigor la sentencia, Google había retirado ya el 40% de las solicitudes. “Tan solo en Francia, hemos revisado unas 300.000 páginas web y eliminado casi un 50%”, continúa en el comunicado.
“No estamos de acuerdo”
La orden de la CNIL, sin embargo, no parece haber sentado nada bien a la multinacional estadounidense. “Nos exige que vayamos un paso más allá y que apliquemos su interpretación de la ley francesa en todas las versiones de Google Search a nivel mundial” asegura el comunicado. Además, muestran su desacuerdo con la petición del Supremo francés: “Tanto a nivel legal como en lo que a principios se refiere, no estamos de acuerdo con esta petición. Cumplimos con las leyes de los países en los que operamos, pero si la ley francesa pasa a ser aplicable a nivel mundial, ¿cuánto tardarían otros países -quizá no tan abiertos y democráticos- en empezar a exigir que sus leyes en materia de regulación de la información tengan un alcance global?”, se preguntan.
La empresa de Sundar Pichai ha presentado hoy un recurso de apelación amparándose en el principio fundacional del Derecho Internacional contra la orden del CNIL. “Estamos a la espera de la revisión del caso por parte del Tribunal”, concluye Google.