UNRWA es la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio. Desde 1949 trabajamos para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina, que representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y que actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado (la franja de Gaza y Cisjordania), a la espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.
Condenados a vivir con esperanza
Hace 71 años tuvieron que huir y dejarlo todo atrás. Todo menos su memoria. 71 años como refugiados. 71 años a la espera de una solución justa y definitiva a su difícil situación. 71 años en los que se han enfrentado y se siguen enfrentando a situaciones humanitarias y humanas extremas en sus lugares de acogida: Cisjordania, la franja de Gaza, Jordania, Siria y Líbano.
Y sin embargo, más de 5 millones de personas, la población refugiada de más larga duración del mundo, sigue amarrada a su dignidad y a su futuro.
¿Vivir o Sobrevivir?
En la franja de Gaza viven casi 2 millones de personas, de ellos 1,4 millones son refugiados y refugiadas de Palestina. Un poderoso informe de Naciones Unidas afirma que en 2020 Gaza será inhabitable. Ya lo es: la población se sigue enfrentando a un bloqueo por tierra mar y aire que dura ya doce años. Viven con escasez de agua potable, medicamentos y electricidad; con un sistema sanitario al borde del colapso, viviendo bajo inseguridad alimentaria y sobreviviendo a continuas rondas de violencia. Gaza es la cárcel al aire libre más grande del mundo.
En Cisjordania, viven bajo ocupación, violaciones permanentes de derechos, demoliciones de viviendas, violencia, y miedo. Miedo al presente. Y al futuro.
En Siria, la población refugiada de Palestina está atrapada en un conflicto armado brutal, desplazados de sus hogares, sin acceso a agua, comida, electricidad y atención médica básica.
En Líbano, viven en campamentos abarrotados en terribles condiciones de vida, faltos de derechos, haciendo frente a desafíos constantes para acceder a empleo y así poder salir del círculo de pobreza extrema. Incluso en Jordania, llevan una vida difícil con miedo a ser olvidados, a medida que aumenta la pobreza y el desempleo.
Hoy, ser refugiado y refugiada de Palestina significa, entre otras muchas cosas, 71 años de sufrimiento. De resiliencia. Y de dignidad, de mucha dignidad.
Hoy se celebra el Día Mundial del Refugiado que conmemora la fortaleza, valentía y perseverancia de millones de refugiados y refugiadas. En el mundo hay 25 millones de personas refugiadas y más de una quinta parte son refugiados y refugiadas de Palestina. En total 5,4 millones de personas. Desde UNRWA España recalcamos a la comunidad internacional la importancia de una solución justa y definitiva para la población refugiada de Palestina. Poner fin al sufrimiento de los refugiados y las refugiadas de Palestina es una cuestión de justicia. Y es urgente. Porque no pueden más.
Y es que no se puede obligar a una población a vivir durante 71 años pendientes del más fino hilo existencial, el de la esperanza con un futuro mejor.
Hace 71 años tuvieron que huir y dejarlo todo atrás. Todo menos su memoria. 71 años como refugiados. 71 años a la espera de una solución justa y definitiva a su difícil situación. 71 años en los que se han enfrentado y se siguen enfrentando a situaciones humanitarias y humanas extremas en sus lugares de acogida: Cisjordania, la franja de Gaza, Jordania, Siria y Líbano.
Y sin embargo, más de 5 millones de personas, la población refugiada de más larga duración del mundo, sigue amarrada a su dignidad y a su futuro.