UNRWA es la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio. Desde 1949 trabajamos para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina, que representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y que actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado (la franja de Gaza y Cisjordania), a la espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.
Los hospitales sin pacientes de Gaza
Una vez más, la crisis sanitaria en Gaza hace sonar las alarmas y pone la vida de cientos de pacientes en peligro. El pasado enero, el Ministerio de Salud de Gaza advertía sobre la necesidad de paralizar los servicios de salud del sector quinario ante la falta de electricidad y combustible. La situación se mantiene crítica y la desesperación de las personas enfermas es insostenible.
Beit Hanoun, una zona situada al norte de Gaza, es un barrio repleto de casas dañadas y a medio reparar, con amplias y arenosas calles extendiéndose entre ellas. El Hospital de Beit Hanoun ha quedado marcado por las trágicas situaciones que se han sucedido en los últimos meses a causa de la crisis de energía: camas vacías sin pacientes, módulos hospitalarios en la penumbra, y máquinas y equipos hospitalarios fuera de servicio. Cientos de pacientes de todas condiciones han sufrido durante este tiempo el cese total o parcial de los servicios médicos.
En este momento, el hospital depende de dos generadores: uno pequeño que necesita 14 mil litros de diésel al mes, y uno grande que dejó de funcionar hace una semana. Los pacientes que se han visto más afectados por esta situación han sido aquellos y aquellas que necesitan una máquina para sobrevivir a causa de deficiencias renales, cáncer, problemas cardíacos, bebés prematuros o pacientes en urgencias.
Khaled Saada tiene 31 años y es refugiado de Palestina procedente de Dimra, un pequeño territorio palestino ocupado a 11 kilómetros del noreste de Gaza. Recientemente le dijeron que tenía un bloqueo en la arteria principal del corazón y reconoce que ha tenido que esperar largas horas hasta recibir los servicios que necesitaba por parte del hospital. “Me he sometido a numerosas cirugías que requieren seguimiento, curación y toma de imágenes periódicas para comprobar que no se produce ninguna complicación, pero sin electricidad o combustible es imposible”, explica.
El caso de Khaled es una muestra de las consecuencias directas del bloqueo israelí sobre la salud de las personas. Su deseo, insiste, es que “el Ministerio, UNRWA o cualquier responsable de esta crisis sanitaria eviten el desastre humanitario que vivimos”.
Basta recorrer los pasillos del módulo de Emergencias de Beit Hanoun, considerado uno de los módulos más activos del centro, para comprobar la tristeza y el silencio de un vacío que tiene las peores consecuencias. El doctor Ayman Hamdan, Director del Departamento de Emergencias, se muestra preocupado por las continuas interrupciones de los generadores. Esta situación, lamenta, afecta negativamente al trabajo de recepción de pacientes en estado crítico.
A esto hay que sumarle los errores en los diagnósticos a causa del cese de funcionamiento del Departamento de Radiología y de los tests. Estos fallos generan una gran impotencia al equipo médico porque pueden llevar a la muerte del paciente por interrupción, por ejemplo, de la máquina de oxígeno o la de esterilización, así como de los quirófanos.
Hamdan nos relata como en las largas noches que pasa en el hospital, lo único que percibe es sufrimiento. La falta de energía obliga también a desconectar la calefacción central del centro lo cual empeora las condiciones de los pacientes y a los trabajadores. “Los encargados de tomar las decisiones,” insta “deben asegurar el suministro eléctrico permanente a los hospitales las 24 horas del día para continuar con el trabajo en todo momento”.
El Dr. Jamil Sarhan, Director del Hospital Beit Hanoun, explica que el hospital brinda servicios a 350 mil personas anualmente en el norte de la franja de Gaza, donde recibe aproximadamente 8.000 pacientes al mes solo en Emergencias, y aproximadamente a 2.500 en la clínica ambulatoria de especialidades (Cirugía General, Otorrinolaringología, Cardiología, Cardiología y Pediatría). Él mismo ha confirmado la interrupción de 200 operaciones quirúrgicas especializadas al mes y 25 operaciones de emergencia. Sarhan asegura que “la causa de estos hechos es la escasez de electricidad”, y advierte que los servicios del hospital se detendrán por completo en los próximos días si la situación no cambia.
Sobre este blog
UNRWA es la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio. Desde 1949 trabajamos para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina, que representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y que actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado (la franja de Gaza y Cisjordania), a la espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.