Ahora en Común continúa fracturada en Sevilla a 48 horas de la prevista repetición de primarias
La dirección regional de IU está convencida de que se llegará a un consenso, pero a estas alturas la provincia de Sevilla es la única que continúa sin listas para las elecciones generales en la candidatura de unidad popular en la que la coalición de izquierdas ha confluido bajo la marca de Ahora en Común. Se trata de una situación en la que se ha originado una profunda brecha entre formaciones que integran IU, en este caso, el Partido Comunista de Andalucía (PCA), por un lado, e Iniciativa por Andalucía (entre otros conformada por Izquierda Abierta), por otro. Los primeros -que copan el comité electoral- sostiene que ha habido 725 sufragios más que votantes en las primarias para elegir a sus candidatos, y los segundos, apuntan que todas esas papeletas deben contar porque sus emisores están debidamente identificados, si bien no dio tiempo a registrarlos en una “compleja” aplicación informática usada para el proceso.
En el calendario, una fecha, el 8 de noviembre, que es la que el comité electoral de Ahora en Común propuso para repetir las votaciones presenciales -con las telemáticas no ha habido problemas- de las primarias para conformar sus listas para el Congreso de los Diputados y el Senado. Pero Iniciativa por Andalucía no acepta que la propuesta sea repetir las votaciones en las 56 mesas electorales que se constituyeron el pasado 25 de octubre, y menos que se limite el derecho a emitir el sufragio a los inscritos previamente. Iniciativa por Andalucía estaría dispuesta a la solución intermedia: que las primarias se repitieran en los seis municipios donde hubo incidencias: Pedrera, El Viso del Alcor, Villanueva del Río y Minas, Carmona, Estepa y Herrera. Y que pudiera votar todo el que no lo ha hecho y quiera.
“Si no, sería consolidar el pucherazo”, en palabras del Álvaro García Mancheño, miembro de la Corriente Unitaria de Trabajadores (CUT), si bien se presentó a título personal porque estas siglas dejaron IU el pasado mes de febrero. Precisamente, este exdiputado de IU en el Parlamento de Andalucía habría sido el más votado para la lista del Congreso de los Diputados -y le correspondería ir de número 1- según los datos que maneja Iniciativa por Andalucía. Pero el PCA se aferra a su recuento -sin los citados 725 votos de la discordia- en los que la ganadora habría sido su apuesta, Lidia Falcón, una referente del feminismo en este país.
En este contexto, Iniciativa por Andalucía ha enseñado los dientes y ha avisado de que si se “da continuidad a este fraude a la democracia” dejarían IU, lo que desde el PCA interpretan en cierta medida como un órdago y no creen que el proyecto de IU en Andalucía corra el riesgo real de esta división. En todo caso, la situación preocupa en los dos frentes, por tanto en cuanto, paradójicamente, se está dañando la imagen de una candidatura supuestamente de confluencia de la izquierda que podría acabar por dividir todavía más a IU. “Eso no va a ocurrir”, sostiene un miembro de la dirección regional de la coalición de izquierdas, que asegura que habrá un acuerdo en las próximas horas. La clave está, claro, en que Sevilla es una de las pocas provincias en las que Ahora en Común tiene opción de conseguir un escaño el 20 de diciembre y la lucha por la primera posición en la lista es clave.
Entretanto, Iniciativa por Andalucía insiste en exigir que el coordinador regional, Antonio Maíllo, y el candidato a la presidencia de la plataforma, Alberto Garzón, tomen cartas en el asunto. Lo que ocurre, es que, pese a que los dos intentan mediar, pretenden separar lo que es su papel en IU de este proyecto de confluencia, con sus propios órganos de funcionamiento para este proceso.