Alcalde y concejales fusilados en 1936 “vuelven” al Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera

José María León Jiménez fue, en 1931, el primer alcalde socialista de localidad cordobesa de Aguilar de la Frontera. Tras el levantamiento militar del 18 de julio de 1936, permaneció oculto, durante varios días al tener conocimiento de las detenciones y los asesinatos que se estaban produciendo. Huyó, junto a varios compañeros al municipio cercano de Los Arenales, donde su hermano Manuel le dio refugio. Pero en la madrugada del 25 de julio, fue detenido cuando se acercaba a su domicilio para ver a su mujer y sus hijos. “La vigilancia a la que fue sometida su casa, logró detenerlo y encarcelarlo en la cárcel de Aguilar de la Frontera hasta la madrugada del día 2 de agosto de 1936. Esa misma mañana, una semana después de su detención, fue sacado del cuartelillo, maniatado con alambres, junto a varios hombres y una mujer, subido a un camión y fusilado”.

Ésta es parte de la biografía del alcalde que, junto a cuatro concejales más de Aguilar de la Frontera fusilados también en 1936, vuelven a formar parte ahora, a título póstumo y para siempre, de la Corporación Municipal de esta localidad. Y es que, de manera pionera en Andalucía, el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera ha formalizado su nombramiento como “miembros honorarios de la Corporación Municipal” para restaurar la memoria de estos cinco ediles.

Así, desde este viernes, José María León Jiménez y los concejales Antonio García Márquez, Antonio Cabello Almeda, Andrés Alberca Conde y Rafael Aparicio de Arcos, todos ellos fusilados en Aguilar de la Frontera y Córdoba capital tras el golpe de estado de 1936, vuelven a figurar como miembros del Consistorio del que fueron apartados.

Acuerdo por unanimidad de la Corporación

Este nombramiento viene a culminar un proceso que el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera, gobernado actualmente por Izquierda Unida y comprometido con la recuperación de la Memoria Histórica, inició el año pasado con la incoación de un expediente a propuesta de IU para restaurar en sus cargos de manera honorífica al que fuera alcalde y a cuatro concejales en 1936. En junio de 2012, en votación ordinaria y por unanimidad de todos los grupos políticos en el Pleno, se aprobó esta propuesta que ahora finaliza con el acto de restauración de la memoria de los ediles fusilados.

Con la presencia de familiares de cada uno de ellos, trasladados desde ciudades como Sevilla, Barcelona, Madrid o Córdoba donde ya tienen su vida, el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera muestra así, en un acto institucional y solemne, su reconocimiento y el de todo el municipio a estos cinco miembros de la Corporación.

Reconstrucción y certificados de sus biografías

En este tiempo, la Asociación para la Recuperaciónde la Memoria Histórica de Aguilar de la Frontera (Aremehisa), ha colaborado en la elaboración del expediente que el Ayuntamiento ha manejado para tomar esta decisión y ha trabajado en la reconstrucción de la biografía de estos represaliados de manera que quedaran certificados los acontecimientos de 1936, como cuenta a eldiario.es/andalucia su presidente, Rafael Espino.

A su juicio, este acto es una muestra del “honor para con las personas con las que esta sociedad mantiene una enorme deuda de gratitud y reconocimiento público e institucional” como fueron el alcalde y sus concejales antes del Golpe de Estado de 1936. Se trata de restaurar la memoria de “aquellos hombres y mujeres a los cuales en el ejercicio de su deber democráticamente alcanzado, les fue arrebatada la vida de forma tan vil y cobarde. De forma tan injusta y premeditada”, señalan desde Aremehisa.

Con este acto pionero en el reconocimiento y la restauración de la memoria de quienes ocuparon un cargo público y fueron represaliados por ello, se lleva cabo “una obligación pública y moral con ellos, para recordar su compromiso, esfuerzo y entrega”.

“Es una obligación que nos atañe a todos”

Desde Aremehisa reconocen, igualmente, la dedicación del entonces alcalde y sus concejales “para mantener viva la llama de la igualdad social, los derechos laborales y la libertad, con su lucha por su dignidad de hombres libres, sin los cuales no hubiese sido posible conocer la España democrática que hoy conocemos”.

Para esta asociación que viene trabajando desde hace años en la recuperación de la Memoria Histórica, no deja de ser “un orgullo” que la administración local, el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera en este caso, haya hecho este trabajo y se ponga al frente del reconocimiento social a los ediles fusilados.

“Es una obligación que nos atañe a todos nosotros, a las instituciones públicas y a sus familiares. Porque la justicia y la recuperación de la memoria van unidas de la mano y son un buen ejercicio de normalidad democrática, de verdadera y plena libertad”, reflexionan.