Disturbios y contenedores quemados en Granada tras una manifestación a favor de la libertad de Pablo Hasél

Una manifestación para pedir la libertad del rapero Pablo Hasél, que acaba de ingresar en prisión para cumplir 9 meses de condena por delitos de enaltecimiento del terrorismo, injurias a la corona y a las fuerzas de seguridad por 64 tuits que escribió entre 2014 y 2016, se ha saldado con una serie de altercados en el centro de Granada. La concentración, que se inició a las siete de la tarde frente a la Subdelegación del Gobierno, ha acabado con calles cortadas y contenedores ardiendo.

Según datos policiales, a la manifestación han acudido alrededor de 200 personas que se han movido por todo el centro histórico de la capital granadina para protestar por la decisión judicial que ha mandado a Hasél a prisión. En un primer momento se han dado cita en la calle Gran Vía, una de las principales arterias de la ciudad, pero a los pocos minutos han marchado en dirección al barrio del Realejo donde han comenzado a quemar los primeros contenedores.

En ese momento, la Policía Nacional los ha cercado para evitar que siguieran produciéndose daños en el mobiliario, momento en el que los manifestantes se han dispersado en varios grupos. Uno de ellos ha quemado más contenedores junto a la Catedral de Granada y a la popular plaza Bib-Rambla. De modo que el centro histórico ha estado sitiado por policías y manifestantes que han alarmado a los vecinos de la zona que rápidamente han acudido a ver qué ocurría.

Con la Policía Nacional persiguiendo a los manifestantes, algunos de ellos han seguido en dirección a Camino de Ronda, la principal vía de comunicación entre el norte y el sur de la capital. Allí, han dispuesto varios contenedores en forma de barricada que han impedido el paso de vehículos lo que ha provocado que varios conductores se quedaran atrapados en un primer momento hasta que efectivos policiales les han despejado por calles paralelas. Antes, en la calle Obispo Hurtado se han quemado hasta cinco contenedores y en Reyes Católicos han cortado el paso de vehículos depositando mobiliario urbano en la calzada.