Cómo reclamar y hasta dónde si eres afectado por listeriosis

Desde una denuncia en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) a unirse de forma conjunta varios afectados e ir a un juzgado. Los afectados por listeriosis tienen varias vías para reclamar legalmente los daños y perjuicios provocados por haber consumido la carne contaminada con listeria. Las vías son muchas, y cada una es más o menos eficaz en más o menos tiempo.

Reclamación directa

Es la forma más sencilla de contactar con la empresa presuntamente infractora, pero en este caso parece descartada. Como cita la web oficial de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), “al reclamar por un problema de consumo, lo mejor es intentar primero un acuerdo amistoso con la empresa a través de su servicio de Atención al Cliente, o directamente con el responsable del establecimiento”. Aconseja dejar constancia escrita de su queja, y si presiente que va a ser complicado, enviar la documentación que respalde su reclamación a través de un burofax, que tiene un precio que ronda los 15 euros. Si pasa un “tiempo razonable” -no especifica cuánto- y no contesta, entonces hay que dar otro paso.

Hoja de reclamaciones

Todas las empresas están obligadas a tenerla, y con el formato actualizado. La ventaja es que es rápida en la gestión, pero la desventaja es que no se obtendrá ninguna indemnización, pero la empresa será expedientada.

Si el primer intento de acuerdo fracasa por esta vía, hay que buscar ayuda oficial. Hay una premisa muy importante -que parece que no afecta a este caso-, ya que no se puede presentar una hoja de reclamaciones si no se ha pagado por el servicio que se quiere reclamar.

OMIC

La Oficina Municipal de Información al Consumidor puede gestionar la reclamación de forma gratuita e incluso llegar a vías judiciales sin coste para el consumidor. Lo más drástico que puede gestionar es un Arbitraje de Consumo. Es un instrumento habilitado por la Administración Pública para reclamar en materia de consumo y resolver conflictos. Es más o menos rápido, tarda unos meses, pero el laudo emitido por la Junta Arbitral de Consumo equivale a una sentencia judicial. Eso sí, ambas partes deben someterse de forma voluntaria, y no parece que Magrudis esté por la labor en vistas de la cantidad de reclamaciones a las que se enfrenta.

FACUA

Un total de 268 personas se han sumando ya a la plataforma puesta en marcha por Facua-Consumidores en Acción para que los afectados puedan canalizar de forma conjunta las peticiones de indemnización por haber sido afectado por esta enfermedad.

La plataforma está activada en la web oficial de Facua desde que se decretó la alerta sanitaria, y está abierta “a cualquier persona que haya sufrido listeriosis vinculada al brote que se originó en una serie de productos fabricados por la empresa sevillana Magrudis SLU”, señala la misma web.

Facua aclara que para acceder a ella “es necesario que cumplas el requisito de ser socio de pleno derecho de nuestra asociación y estar al corriente de la cuota que abonamos todos los asociados para garantizar nuestro funcionamiento, y si todavía no eres socio pleno, puedes darte de alta pulsando en este enlace”.

“Si este mes te haces socio de pleno derecho, abonarás una cuota de 48,65 euros que cubre tanto los 27 euros de nuestra cuota de inscripción como la anual prorrateada en función de los meses que quedan hasta final de año”, señala la web, que cita que “si no logramos una solución extrajudicial a la reclamación, solicitaremos tu personación en la causa penal que se abra en los tribunales como consecuencia de la querella presentada por FACUA o de las actuaciones iniciadas por la Fiscalía”, que aclara que puede reclamar cualquier persona afectada, haya estado o no hospitalizada.

Denuncia por lo penal

Es algo lento, caro y complicado, por lo que los expertos aconsejan presentar denuncias conjuntas de todos los afectados posibles. No parece el caso, pero para indemnizaciones inferiores a 900 euros, o si solicita un proceso de conciliación, no es necesario tener  abogado ni procurador. El afectado tiene la posibilidad de proponer una audiencia previa al juicio o solicitar una conciliación, lo que haría, si gana, que no tendría que pagar impuestos por la indemnización obtenida.

Seguro del hogar

No muchas personas lo saben, pero el seguro de hogar que se paga de forma sistemática todos los años y en infinidad de ocasiones no se utiliza puede ser una solución para estos casos. Muchos de ellos tienen una cláusula de defensa jurídica, que garantizan que en caso de un problema relacionado con consumo se pueda tener asistencia legal gratuita en todo el proceso que se siga.

Demandas colectivas

Aunque a simple vista puede ser la mejor opción, también cosas en contra. Las ventajas pasan porque le cuesta menos a los perjudicados ir a juicio, y es más eficiente, ya que al resolver el conflicto un sólo juez y ser necesarios menos jueces, la resolución debe ser emitida con más celeridad.

Por contra, en una demanda colectiva todos los representantes se tienen que poner de acuerdo para tomar las decisiones, y, generalmente los representantes llegan a acuerdos donde se arregla con compensación económica o descuentos en futuros servicios.

En este caso, se puede dar el caso de que se consiga una indemnización millonaria, pero que no se pueda cobrar finalmente porque la parte condenada no la pueda asumir.