El Gobierno de Aragón ha autorizado un gasto de 230.000 euros para contratar la redacción del proyecto de ejecución de las obras del “Museo de la Guerra Civil. Batalla de Teruel”. Se inicia, de esta forma, la tramitación de un contrato de servicios para la redacción de dicho proyecto en 2019. El coste de licitación de la obra es de 8,7 millones de euros.
El objetivo es que las obras comiencen antes de las elecciones municipales y autonómicas de 2019. Será el primer museo de la Guerra Civil de España que cuente la contienda en su conjunto: “El museo se concibe para ser un referente nacional e internacional sobre la Guerra Civil en España y para invitar a hacer una reflexión conjunta”, dijo en su momento la consejera de Cultura del Ejecutivo autonómico, Mayte Pérez. El director del proyecto, Joan Santacana, explicó que Teruel es el lugar idóneo por ser “la única capital de provincia que fue martirizada por ambos bandos”.
Desde el Gobierno de Aragón consideran “prioritario contar con un lugar de referencia destinado a informar y poner en conocimiento de la ciudadanía las causas, desarrollo y consecuencias del conflicto bélico”. El museo se ubicará en un edificio de 3.500 metros cuadrados. Arquitectura y museografía se presentan en esta iniciativa, explican, “como un conjunto coherente e indisociable que buscan multiplicar el efecto de su mensaje, a través de una exposición permanente, un espacio importante para exposiciones temporales, un auditorio y una zona de servicios con cafetería y tienda”.
Además, habrá una biblioteca “que será especializada y muy útil para los investigadores” y espacios “para que las asociaciones memorialistas puedan desarrollar cuantos proyectos consideren oportunos”.
Aseguran en el Ejecutivo que el proyecto plantea la posibilidad de contar con propuestas culturales y vinculadas con la memoria durante todo el año, “convirtiéndose así en un espacio de referencia cultural constante en nuestra comunidad, con relevancia también en la difusión y la investigación. Dicha programación estará abierta a las necesidades y sugerencias de las asociaciones memorialistas y los activos culturales de la ciudad y la provincia”.
Además de la museografía, señalan, “que quiere hacer comprender a los visitantes la Guerra Civil no solo desde el punto de vista militar sino sobre todo desde la perspectiva de la población civil, el edificio incluye un gran recinto al aire libre concebido como jardín reservado para albergar una amplia muestra de materiales pesados de guerra (acorazados, tanques, etc.) y el recuerdo y homenaje a las víctimas a través de un memorial por la paz en un material que refleja para que la sombra del visitante se vea sobre los nombres y una película de agua que impida el vandalismo”.