Alex Txikon ha alcanzado ya el segundo campo de altura en su aventura de ser el primero en hollar la cumbre más alta del mundo en invierno y sin oxígeno artificial. El domingo, día 14, los alpinistas salieron del campo base, a 5.300 metros, hacia el primer campo de altura situado a 6.050 metros. Alcanzaron el objetivo en 5 horas, acompañados de mucho peso. La noche fue verdaderamente fría y apenas pudieron dormir debido a las fuertes ráfagas de viento.
Ayer, día 15, el viento ofreció una pequeña tregua y alcanzaban el segundo campo de altura. El año pasado, este trabajo supuso dos días de actividad, este año, sin embargo, lo han conseguido en un solo día, pese a que las condiciones atmosféricas adversas superaban los parámetros del año pasado. Por lo tanto, encontrar la ruta en peor estado y superarla en mejor forma, supone un gran logro. Además, este año lo han colocado 150 metros más arriba que el año pasado; concretamente, a 6.500 metros, dónde han depositado 600 metros de cuerda.
Posteriormente han regresado al campo base tras una complicada bajada marcada por el fuerte viento que ha dificultado notablemente la actividad.
Así lo explicaba el propio Alex Txikon:
“Estoy muy muy contento, no pensaba ni por asomo que fuésemos a alcanzar el C2 a 6.500 metros en tan solo una jornada. Y con un equipo reducido de sólo 6 personas. De momento, creo que he de levantar el pie del acelerador y dosificar, puesto que esto no son los 100 metros, esto es una gran maratón. De momento, 6 largas jornadas, muy duras, de las que estamos muy orgullosos.”