Espacio de opinión de Canarias Ahora
Cardona y los pobres
A Juan José Cardona no le gustan los pobres, les molesta su existencia, y su visión. Desde que hace años le conozco sé de qué pie cojea, y los mendigos para Cardona son una especie a extinguir. De ahí que la Policía Local, cual si fuese la Gestapo, se apresta a eliminar a los pobres que duermen al raso en Las Alcaravaneras y en Las Canteras, en las zonas de La Puntilla y Peña de la Vieja mayormente. La Policía Local ha emitido un bando en el que se establece un servicio fijo para evitar que los mendigos puedan pernoctar en las dos playas capitalinas, y Cardona ha defendido con uñas y dientes esta solución, en vez de buscar una más social como por ejemplo buscar un acomodo nocturno para que estas personas no tengan que dormir a la intemperie.
El representante de la Unión General de Trabajadores (UGT) en el cuerpo, José Antonio Alonso, ha sido más clarividente que el alcalde y ha manifestado que “no creemos que la solución a la mendicidad sea la represión policial”. Mientras Cardona defiende entusiasmado las nuevas órdenes policiales, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Isabel Mena, también ha tenido una posición racional y humana afirmando que “es prioritario que se busque una solución social y solidaria para acabar con el problema de las personas sin hogar en el municipio, antes que ordenar una solución policial, lo que debería hacer el alcalde es encargar una intervención social profunda entre las personas sin techo de esta ciudad para garantizar su reinserción social y ofrecerles un lugar en donde pasar la noche dignamente”, expresó la portavoz socialista.
Isabel Mena sin duda ha dado en el clavo. Y el alcalde Cardona, pese a que el presupuesto para 2015 ha crecido un 7%, es decir un total de 303,6 millones de euros, exactamente 20,1 millones más que el actual ejercicio, no ha dedicado muchas perras para servicios sociales, mientras que para publicidad, oropeles y voladores los euros corren por el Canódromo.
A Juan José Cardona no le gustan los pobres, les molesta su existencia, y su visión. Desde que hace años le conozco sé de qué pie cojea, y los mendigos para Cardona son una especie a extinguir. De ahí que la Policía Local, cual si fuese la Gestapo, se apresta a eliminar a los pobres que duermen al raso en Las Alcaravaneras y en Las Canteras, en las zonas de La Puntilla y Peña de la Vieja mayormente. La Policía Local ha emitido un bando en el que se establece un servicio fijo para evitar que los mendigos puedan pernoctar en las dos playas capitalinas, y Cardona ha defendido con uñas y dientes esta solución, en vez de buscar una más social como por ejemplo buscar un acomodo nocturno para que estas personas no tengan que dormir a la intemperie.
El representante de la Unión General de Trabajadores (UGT) en el cuerpo, José Antonio Alonso, ha sido más clarividente que el alcalde y ha manifestado que “no creemos que la solución a la mendicidad sea la represión policial”. Mientras Cardona defiende entusiasmado las nuevas órdenes policiales, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Isabel Mena, también ha tenido una posición racional y humana afirmando que “es prioritario que se busque una solución social y solidaria para acabar con el problema de las personas sin hogar en el municipio, antes que ordenar una solución policial, lo que debería hacer el alcalde es encargar una intervención social profunda entre las personas sin techo de esta ciudad para garantizar su reinserción social y ofrecerles un lugar en donde pasar la noche dignamente”, expresó la portavoz socialista.