Crisis financiera

Éstos (los apostadores) son los dueños invisibles de la economía mundial, los que imponen presidentes, alianzas, políticas y estrategias mundiales, son los explotadores del ser humano, los sustentadores del trabajo asalariado y los grandes y únicos beneficiarios del las riquezas del planeta.

Y como muestra de esta realidad, es la estimación de que la economía especulativa es diez veces superior a la dimensión que tiene la economía real productiva de bienes y servicios.

La crisis financiera que enfrenta el sistema capitalista, inunda las áreas más diversas de la vida social, económica y política, dejando como consecuencia hambre y miseria para la inmensa mayoría de la población mundial y por otro lado la más brutal concentración de capitales y riquezas para los sostenedores del actual régimen de consorcios capitalistas con la consecuente obligación del recrudecimiento de los métodos de represión, explotación y control para mantener las ganancias empresariales y de dominación política.

Se observa como el capitalismo corporativo se protege a si mismo y no pierde oportunidad para devorar los capitales dispersos y concentrarlos en beneficio exclusivo de la misma burguesía.

Iniciada la crisis, los Bancos Centrales, han salido de inmediato a sostener el sistema financiero, inyectando cientos de miles de millones de dólares, para “rescatar” no a los seres humanos que día a día quedan en la miseria o mueren de hambre, sino a apuntalar los cimientos del capitalismo: rescatar empresas que erraron en la ruleta de los beneficios financieros, mientras los trabajadores/as pagamos los errores de los capitalistas.

Es evidente que el precio para el mantenimiento del capitalismo, se paga con la vida de los trabajadores y desposeídos del mundo y que la superación de este estado de cosas pasa por transformar de raíz toda la estructura sobre la cual está montado el actual régimen de explotación y opresión humana.

Está claro que el capitalismo solo ofrece explotación y opresión en momentos de bonanza y miseria y muerte en tiempos de crisis, solo el socialismo, coloca al ser human, en el lugar que le corresponde, haciendo más racional y humana toda la actividad productiva y de intercambio en beneficio de toda la humanidad y no de los capitalista y explotadores de siempre.

Y seguimos proponiendo, ¿para cuándo una respuesta contundente?

Vicente Quintana