Los milagros de Gutiérrez por Eusebio Bautista

Para los ciudadanos, que asistimos como espectadores a los plenos, el día no empezó bien. El policía local que registra y acredita a los asistentes, parecía estar enfurruñado. A pesar de que se le indicó que este había empezado, se limitó a decir “que a él no le habían dicho, todavía, que podíamos subir al salón de plenos”. Como no tenía interés en saber si había empezado o no, cosa que con una simple llamada podía averiguar, nos tuvo a no menos de 12 personas esperando en la entrada a las Casas Consistoriales. Consecuencia de ello, subimos al salón cuando la sesión había comenzado hacía más de 15 minutos.

Además se cambió el orden de los temas a tratar, y el Concejal de Hacienda estaba acabando su intervención presentando el Presupuesto 2012. Aún así dio tiempo a oírle sobre “la nefasta gestión socialista” refiriéndose a la situación económica heredada en las cuentas municipales.

En su primer turno de intervenciones Pedro Quevedo (Nueva Canaria) comentó lo increíble del presupuesto de ingresos, poniendo como ejemplo la previsión de recaudación por el IBI, establecida en un 97% cuando el año 2011 fue menor del 84%. Nardy y Franquis, al igual que Quevedo, criticaron ese y otros aspectos del presupuesto, y justificaron su voto en contra.

El Concejal de Hacienda, Agustín Gutiérrez, en uno de sus turnos de intervención, acusó a la oposición de no saberse la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, que en su artículo 162 indica lo que hay que incluir en el Presupuesto.

Consultada la citada Ley y el artículo 162, que mencionó con la boca llena el Concejal de Hacienda, ante mi sorpresa, no dice nada del tema. Después de leer los artículos próximos al 162, por si Agustín Gutiérrez hubiera tenido un lapsus, aparece uno que especifica el “contenido de los presupuestos” y es el 165, que en su apartado b) indica lo que hay que incluir en ellos y dice literalmente “Los estados de ingresos, en los que figurarán las estimaciones de los distintos recursos económicos a liquidar durante el ejercicio”.

Precisamente es eso, en la estimación, es donde esté el engaño que comete el Concejal de Hacienda. En los ingresos, por ejemplo, por recaudación del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), hace una estimación para el 2012, del 97% del importe total. Unos días antes, Agustín Gutiérrez había hecho unas declaraciones, en las que indicaba que el porcentaje de recaudación del IBI en 2011 había sido inferior al 84% y, a su vez, había bajado un 0,4% sobre el del año 2010.

Si la recaudación del año 2011 es inferior al 84% y bajando con respecto a la del 2010 ¿Cómo se atreve el Sr. Gutiérrez a poner, en el presupuesto del 2012, un 97%? ¿Es que espera un milagro? ¿Es que él sabe que vamos a salir de la recesión y de ahí sus estimaciones? Conviene saber que la diferencia de recaudación entre el 97% estimado y el 84% real - que como mucho ingresará este año ? es superior a los 10 millones de euros.

El Concejal de Hacienda salió del paso, en el Pleno, con la historia de que la oposición no se sabía el artículo 162 de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, pero se coge antes a un mentiroso que a un cojo......

Lo que destacaron los periódicos al día siguiente, fue el debate abierto por el alcalde, después de la aprobación del presupuesto y de la plantilla de personal. Haciendo uso y abuso de su condición de alcalde, por la que puede intervenir sobre lo que quiera y en cualquier momento, dio severa reprimenda a los portavoces de Compromiso y PSOE (dejó aparte a NC porque no estaba en la corporación en el pasado mandato). Desde decirles que no estaban legitimados para hablar del presupuesto del PP, hasta llamarles cínicos, por la gestión municipal que habían realizado gobernando juntos.

En las contestaciones, Nardy se mostró muy enfadada y le afeó que le dijera que estaba deslegitimada y que era una cínica. Franquis, cuando llegó su turno, le recordó a Cardona el pasado. Desde los millones de euros que había pagado el Ayuntamiento, por sentencias de actuaciones que nacieron en la época en que Cardona era concejal de urbanismo, hasta su próxima visita a los juzgados, como imputado en el caso Canódromo.

Más que un debate parecía una pelea callejera, que precisamente no dignifica la política ni a los políticos que la practican. Estoy seguro que cuando los ciudadanos los votaron, no lo hicieron para que sacaran el ventilador y el “tu más”.

Me dio la impresión que Cardona le estaba dando gusto al cuerpo, aprovechando su situación de alcalde, delante de los suyos y de los medios, sabiendo que su intervención sería la noticia, y no el presupuesto.

En mi opinión un alcalde tiene que servir de pacificador, en caso de altercado entre concejales y grupos políticos. No de incendiario.

Eusebio Bautista

Para los ciudadanos, que asistimos como espectadores a los plenos, el día no empezó bien. El policía local que registra y acredita a los asistentes, parecía estar enfurruñado. A pesar de que se le indicó que este había empezado, se limitó a decir “que a él no le habían dicho, todavía, que podíamos subir al salón de plenos”. Como no tenía interés en saber si había empezado o no, cosa que con una simple llamada podía averiguar, nos tuvo a no menos de 12 personas esperando en la entrada a las Casas Consistoriales. Consecuencia de ello, subimos al salón cuando la sesión había comenzado hacía más de 15 minutos.

Además se cambió el orden de los temas a tratar, y el Concejal de Hacienda estaba acabando su intervención presentando el Presupuesto 2012. Aún así dio tiempo a oírle sobre “la nefasta gestión socialista” refiriéndose a la situación económica heredada en las cuentas municipales.