El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 8 de Arrecife ha condenado al Banco Popular a abonar 4.951,91 euros a un matrimonio británico a quien colocó un contrato de permuta financiera de tipo de interés (IRS o ) en la firma de una hipoteca en presencia de un traductor.
La juez ha decretado la nulidad del contrato por error en el consentimiento. La pareja reclamó a su asesor bancario mediante varios correos electrónicos tras comprobar que había un cargo practicado por el Banco Popular de casi 5.000 euros en su cuenta en enero de 2010.
La cancelación del producto le suponía, además, 20.000 euros adicionales, informa la Asociación de Minoristas Afectados por Permutas y Derivados Financieros (Asuapedefin + Apymifid), por lo que los ciudadanos de nacionalidad inglesa decidieron demandar.
En el fallo, la juez concluye que los demandantes desconocían lo que estaban firmando y contratando a consecuencia de la “falta de información” proporcionada por la entidad bancaria, así como la “falta de traducción del mismo a la lengua del actor”.