El profesor de la Universidad de Alaska hasta 2010, Richard Steiner, especialista en conservación marina y asesor de una decena de países en materia de perforaciones en mar abierto, ha advertido del riesgo que corren las aguas de Fuerteventura y Lanzarote con la Declaración de Impacto Ambiental aprobada recientemente por el Gobierno de España, que permite las prospecciones petrolíferas de Repsol.
Steiner explica que las condiciones impuestas por el Ejecutivo central al proyecto de perforación cercano a las Islas “son de hecho tan rudimentarias” que “sigue siendo demasiado arriesgado”. Asimismo, advierte de que los requisitos ahora conocidos son “terriblemente insuficientes”, según afirma el Cabildo de Fuerteventura en un comunicado.
La Administración majorera reproduce las palabras del especialista, que pone de relieve que un proyecto de perforación exploratoria en aguas profundas es extremadamente peligroso y “plantea un alto riesgo de una explosión catastrófica”.
“Un reventón de este tipo pondría en peligro todo lo que define las Islas Canarias: medio ambiente, la cultura y la economía. Hemos aprendido esta lección de la manera más difícil en los EE.UU., con el desastre de BP Deepwater Horizont en 2010”, recuerda Steiner.
Tras haber estudiado la documentación facilitada por Repsol y conocer ahora la Declaración de Impacto Ambiental, Steiner señala que “tenía la esperanza de que el Gobierno de España apreciaría la enormidad del riesgo de la propuesta de perforación de Repsol”. Sin embargo, dadas las condiciones mínimas que el Gobierno pone al proyecto, “parece dispuesto a colocar las Islas Canarias en riesgo de un derrame de petróleo catastrófico”, apostilla. Una actitud que a su juicio “parece muy irresponsable, incluso por negligencia grave, y podría ser un error trágico”.
En este punto, el Cabildo majorero puntualiza que la DIA desliga el riesgo de accidentes del proyecto y no establece medidas obligatorias, sino meras recomendaciones. Algo que, en opinión de la administración majorera, resulta “asombroso”, por lo que exige al Ministerio de Medio Ambiente que se pronuncie sobre el riesgo y adopte medidas a cumplir por el promotor y no elabore “meras recomendaciones, como es el caso”.
El fallo de Repsol en Namibia, presente
Steiner, que actualmente está considerado como un especialista de referencia a nivel internacional en torno a la peligrosidad de las perforaciones en aguas profundas, ya recomendó en las alegaciones a la DIA de Repsol presentadas en septiembre de 2013 que se evaluarán riesgos por un derrame accidental de 30.000 barriles diarios de petróleo, frente a los 1.000 que proponía el documento de Repsol. Sin embargo, el Gobierno de España se conformó con pedir a Repsol que ampliará los cálculos para sólo 3.000 barriles diarios, diez veces menos que lo recomendado por Steiner.
El especialista también participó a comienzos de 2014 en la gestiones realizadas por varios ciudadanos de Fuerteventura y Lanzarote ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, consiguiendo que éste mantuviera abierta una queja ciudadana (y la subsiguiente investigación) sobre las prospecciones petrolíferas en Canarias, “pese a los intentos del grupo popular por cerrarla”, recuerda el Cabildo. Los argumentos expuestos fueron de tal contundencia que el propio grupo popular europeo varió su opinión y aceptó mantener abierta la queja ciudadana, acordándose entonces por unanimidad.
Otro frente abierto que tiene presente Steiner, es el desastre que estuvo a punto de provocar en la costa de Namibia el barco perforador que Repsol utilizará en las prospecciones de Canarias, el Rowan Reinaissance, a raíz de dos fallos producidos de forma consecutiva en dos pozos distintos, que llevaron a abandonar la perforación.