Baloji y Afriquoi sorprenden en la última jornada del WOMAD Fuerteventura
La segunda edición del WOMAD Fuerteventura llegó a su fin tras 16 horas de música en los dos escenarios construidos para la ocasión sobre la arena de Gran Tarajal. Tras una primera jornada en la que la playa en ocasiones fue una pista de baile, la localidad majorera dio paso a las reivindaciones de Amparo Sánchez o Baloji, en una noche en la que se hacía difícil andar por el paseo marítimo debido a la gran cantidad de personas que se acercaron a disfrutar de un festival 100% gratuito.
OnoFreeFadar, desde Tenerife, fueron los primeros en darle uso al escenario principal, con sus seis componentes vestidos cual gansters y unas letras originales y llamativas. Tras ellos actuó otro canario más, Maldito Ramírez, quien reconoció ser un gran fan del festival y que disfrutó ser el protagonista durante una hora del mismo. El grancanario repasó su repertorio musical, explicando el por qué de cada una de sus canciones y trayendo al festival del mundo el timple, el instrumento más representativo del Archipiélago.
Spiro esperaba en el escenario B. Esta banda formada por cuatro instrumentistas (una guitarra, un acordeón, un violín y una mandolina) llegada desde Reino Unido sedujo a los asistentes con temas tradicionales británicos y otros de su propia creación. Aunque comenzaron sosegados, contagiaron a unos espectadores que, cuando no se dieron cuenta, danzaban las melodías.
A partir de aquí, las revoluciones subieron cuando Baloji comenzó en el otro escenario a actuar. El artista congoleño transmitió toda su fuerza durante una hora en la que puso en acción el soul, funk, blues, jazz y compases africanos que eran acompañados por su voz, en ocasiones rapeada. Tras el terremoto africano, la desgarradora voz de Ska y su soul tomaron el protagonismo en la otra punta de la playa.
Una de las actuaciones que más se identificó con los oyentes fue la de Amparo Sánchez. La artista andaluza no dejó pasar desapercibido las movilizaciones de este 7 de noviembre contra la violencia machista y propuso temas contra esta lacra de la sociedad y recordó que “mientras la mujer fue tenida en cuenta, la tierra no se envenenó”. Y es que, las letras del último disco de la cantautora promueven una visión esperanzadora del mundo y del papel de la mujer en esa nueva humanidad. Concluyó diciendo que su mayor deseo es una sociedad con igualdad real.
Afriquoi pegó fuerte durante los 60 minutos en los que actuaron con su música africana en directo (la kora gambiana era uno de los instrumentos principales en su sexteto) que estaba filtrada con ritmos electrónicos de fondo y que hizo que fuera imposible no danzar. Disfrutaron tocando para Fuerteventura y terminaron reconociendo que el de este sábado fue uno de los mejores públicos ante el que habían actuado.
Los últimos en cerrar este año el escenario principal fueron Asian Dub Foundation quienes con su hiphop pegadizo revolucionaron a los que quisieron apurar las últimas horas de esta edición. El encargado de despedir, ojalá que hasta el próximo año, el WOMAD fue Dave Watts, presentador durante las dos jornadas y que se desmelenó con lo que más le gusta, ser D.WattsRiot y regalar una poderosa sesión.