La participación política (3). La política fuera de las instituciones

Es común que muchas veces se asuma que el término 'política' solamente engloba las acciones que realizan los representantes políticos en las instituciones públicas. Si lo restringimos solamente a eso, entenderíamos que la ciudadanía no tiene más posibilidad de participar en política que dentro de los partidos políticos o en aquellas pocas instituciones locales que lo permiten a través de reglamentos de participación ciudadana.

Pero la política es mucho más que las decisiones de los gobernantes o los debates de los diputados y las diputadas, porque también forman parte de la política los principios o directrices que guían las actuaciones de las personas o entidades. Incluso las decisiones personales que tomamos día a día constituyen decisiones políticas. Por ejemplo: decidir comprar un kilo de papas del país o comprarlas de fuera, decidir separar la basura para reciclar o mezclarla toda, o decidir usar el vehículo privado o el transporte público son parte de la política que cada persona adopta en sus acciones cotidianas.

Debemos considerar los espacios colectivos de participación política que hay fuera de las instituciones públicas. Por un lado, los movimientos sociales sirven para organizar a grupos de personas que tienen reivindicaciones similares. Y por otro lado los partidos políticos representan intereses de determinadas clases sociales.

Los sindicatos son el caso más típico, donde las personas trabajadoras se juntan y se organizan por gremios o lugares de trabajo. Yo considero que hoy la lucha sindical es más necesaria que nunca, porque los derechos del trabajador están cayendo continuamente en picado en favor de los intereses de la clase empresarial, pero echo en falta más unidad sindical y más activismo y creo que de alguna forma éstos deberían analizar las causas que les dificultan cada día más ser referentes para muchas personas trabajadoras.

Además tenemos en la Isla nuevos movimientos sociales que han surgido recientemente y que rompen el mito de que en La Palma no se mueve nada: La Plataforma contra las Plantas de Asfalto, La Plataforma Ciudadana por el Agua Pública de Los Llanos de Aridane, La Plataforma de Desempleados y Desempleadas de La Palma, La Calle, otros más de tipo cultural, etc. La importancia de estos grupos es que permiten trabajar juntas en torno a objetivos comunes a personas que pueden tener diferentes ideologías o afinidades partidistas.

En cuanto a los partidos políticos, no en todos hay espacio para la participación política, puesto que la mayoría de los que conocemos no ejercen la democracia interna o están supeditados a las decisiones de los poderes económicos. Este es el caso del PP y el PSOE que están condicionados por las decisiones de los organismos que forman la troika (CE, BCE y FMI). Debido a esta carencia democrática el PSOE se esfuerza por centrar el debate en torno a la elección de personas y no a la toma de decisiones. Pero la cuestión de la democracia interna está en la toma colectiva de decisiones y en la independencia de los poderes fácticos, ambos valores que puedo decir que son seña de identidad de Izquierda Unida, donde participo.

Por último animo a todas las personas de izquierda que tienen inquietudes políticas a contribuir a cambiar esta sociedad en la que las mayorías sociales estamos perdiendo derechos, bien sea a través de los movimientos sociales o bien en movimientos políticos como IUC.