Espacio de opinión de La Palma Ahora
‘El Protocolo’
Con la posible salida del Gobierno autonómico en el horizonte, me imagino a un Antonio Castro confuso, incapaz de comprender cómo se ha podido llegar a esta situación.
Para un indiscutible líder y varón del nacionalismo canario representado por Coalición Canaria, la posibilidad de quedarse fuera del Ejecutivo canario resulta, cuanto menos, inverosímil. Lo cierto es que se podría haber prevenido, o por lo menos, paliado hasta cierto punto. El declive sufrido por los nacionalistas de CC no ha surgido ahora; lleva varios años desarrollándose.
Algunos se atreverían a decir que la formación de la bandera estrellada defiende un proyecto político caduco. En el caso de la Isla de La Palma su argumentario no ha variado mucho: desde la demoníaca mano negra procedente de la capital, hasta la necesidad de atender las demandas de las islas no capitalinas. Pasando por la agenda canaria, ese ente abstracto que muy pocos ven, pero que al parecer, todos tenemos que fumarnos. Más de 20 años después, parece que no se ha hallado solución para esos mismos problemas.
El nacionalismo canario es tal vez el más justificado de España. No en vano, somos una región ultraperiférica y fragmentada, lo que crea un ambiente propicio para la existencia de partidos nacionalistas.
Lejos de entrar en un debate ideológico, para ser justos, CC ha pecado de no querer asumir sus errores. El autoanálisis que nunca llegó hizo que José Luis Perestelo, histórico presidente del Cabildo de La Palma durante 13 años, regresara como candidato. La ausencia de caras nuevas en algunas listas difiere de lo que se entiende por fuerza renovada, eslogan que emplearon para las elecciones municipales y autonómicas de 2015.
Me imagino que en Coalición Canaria deben tener un manual de actuación para cada periodo postelectoral. Cuando se lleva gobernando ininterrumpidamente desde abril de 1993, ya se sabe qué contactos políticos han de tener lugar, qué argumentario utilizar y con qué partido llegar a un acuerdo. A este planning lo podríamos llamar El Protocolo.
Ahora que se dilucida un pacto entre el PP, PSOE y NC para echar a CC del Gobierno –a la espera de las tres reuniones clave que tendrá Clavijo este lunes- supongo que los dirigentes nacionalistas que lideran el partido prácticamente desde sus inicios, se encontrarán algo desorientados. Puede que la pregunta más formulada entre las filas de CC estos días sea: ¿Y ahora?¿Cuál es el protocolo?