El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón abrió este miércoles diligencias para investigar las denuncias sobre las presuntas torturas que cuatro presos habrían recibido durante su internamiento en el centro de detención estadounidense de Guantánamo.
Según un auto hecho público este miércoles, el juez pide además al titular del Juzgado Central de Instrucción número 2, Ismael Moreno, que le remita la causa que tiene abierta por los vuelos secretos de la CIA en dirección a la prisión que habrían hecho escala en territorio español.
Las nuevas diligencias abiertas por Garzón son independientes de la querella presentada contra seis miembros de la Administración del ex presidente de EEUU George W. Bush, que sentaron las bases legales para la apertura de la cárcel y cuya admisión a trámite será considerada por el juez Eloy Velasco.
Los cuatro presos que denunciaron torturas en Guantánamo son Hamed Abderraman Ahmed, Lahcen Ikassrien, Jamil Adullatif El Banna y Omar Deghayes. Todos ellos se enfrentaton en España a la acusación de pertenencia a organización terrorista aunque finalmente ninguno fue condenado por este delito.
EEUU lo ve prematuro
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos considera “prematuro” y “poco constructivo” que un juez extranjero quiera investigar el tratamiento recibido por los presos de Guantánamo, después de que el juez español Baltasar Garzón abriera este martes diligencias para investigar las denuncias sobre las presuntas torturas a cuatro presos durante su internamiento en el centro de detención de la base naval.
“Una investigación desde el extranjero de estos asuntos sería prematura y poco constructiva”, afirmaron fuentes oficiales estadounidenses consultadas por Europa Press, que precisaron que Estados Unidos está siguiendo “de cerca” el caso y que ha hecho las consultas apropiadas con los gobiernos implicados, incluido España.
Además, subrayan que en Estados Unidos ya se ha realizado una investigación “exhaustiva” de todo lo relacionado con el tratamiento de los detenidos en Guantánamo y recuerdan que recientemente el presidente estadounidense, Barack Obama, ha dicho al respecto que “hay que mirar para adelante y no hacia atrás”.
Por último, añaden que el actual inquilino de la Casa Blanca ha dicho “claramente” que no considera apropiado procesar a los oficiales de inteligencia que cometieron las presuntas torturas durante los interrogatorios “siguiendo directrices del Departamento de Justicia” y que la posibilidad de juzgar a los que idearon el andamiaje jurídico “es una decisión que corresponde al fiscal general”.