La Audiencia de Cuentas tumba la excusa de CC para romper el pacto con el PSOE

Fernando Clavijo, presidente del Gobierno de Canarias y Jesús Morera, exconsejero de Sanidad. (Canarias Ahora).

Silvia Álamo

Las Palmas de Gran Canaria —

El informe de la Audiencia de Cuentas de Canarias de 2016 revela que el supuesto desfase en Sanidad que tensó las relaciones entre Coalición Canaria (CC) y el Partido Socialista (PSOE) hasta romper el pacto de gobierno el 23 de diciembre de ese mismo año es falso. Según el documento, Sanidad redujo en 2016 su gasto en 77,4 millones de euros con respecto a 2015.

Cuando aún faltaban cuatro meses para que finalizara el año, el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, comentó en la Cadena Ser que, de continuar la proyección de los primeros ocho meses del año en Sanidad, el desajuste en las arcas públicas ascendería a 150 millones de euros.

El nacionalista advirtió que la situación se volvería “absolutamente insostenible” y culpó a los gerentes del área de salud.  Los datos en la publicación de la Audiencia de Cuentas desvelan que el gasto pasó de 2.736,6 millones de euros en 2015 a 2.658,2 al año siguiente. 

Así, el 2 de agosto de 2016 ordenó a los gerentes de los hospitales públicos de las islas que recortaran 50 millones de euros en los últimos cinco meses del año para atajar la desviación detectada en las cuentas de la Consejería. “Su única preocupación era que nos ajustáramos al presupuesto y al techo de gasto. No le importaba dónde lo hiciéramos (en qué servicios y prestaciones)”, contó a Canarias Ahora una de las personas presentes en esa reunión.

En septiembre de ese año desde Sanidad solicitaron a las gerencias de las diferentes áreas de salud de las islas que hicieran “un esfuerzo extra de ajuste máximo posible al gasto reflejado en los presupuestos” de la comunidad para 2016. “Más dinero no hay”, dijo el presidente del Gobierno y recordó que ese año hubo un incremento de 25 millones de euros en el presupuesto y, además, se consiguió un crédito extraordinario de 10 millones.

Entre tiras y aflojas, Clavijo y el antiguo consejero de Sanidad, el socialista Jesús Morera, mantuvieron una conversación telefónica en la que el presidente del Gobierno le pidió al socialista que recortara en la vacuna de la Hepatitis C. En esa misma llamada el consejero le contestó que eso era inviable y le recordó que en Galicia había altos cargos imputados por la muerte de pacientes a los que se le negó el tratamiento.

Y así fue hasta el reparto del FDCAN (Fondos de Desarrollos de Canarias), la gota que colmó el vaso. El 23 de diciembre de ese año se rompió el pacto. Los consejeros del Partido Socialista se marcharon del Gobierno y llegaron los nuevos altos cargos políticos, quedando el Ejecutivo en minoría con CC.  

Tras algo más de un año con el nuevo gobierno, este martes, el grupo parlamentario de Nueva Canarias denunció que el informe de cuentas  de 2016 “ratifica las prácticas clientelares, pleitistas, el enchufismo y la apuesta por el cemento” que su partido achaca al Gobierno regional. “Nos ha dado la razón cuando denunciamos que se falsearon los datos presupuestarios de la Consejería para crear una crisis de Gobierno”, denuncia la diputada Esther González (NC).

Según González, el informe del órgano fiscalizador evidencia que el exceso de gasto en Sanidad que se alegó para cerrar de forma anticipada el presupuesto “no existió”. “Falsearon los datos presupuestarios sanitarios para justificar una bronca con el PSOE y crear una crisis de Gobierno”, afirma la nacionalista.

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