La ministra Maroto pide al Gobierno de Canarias repensar el proyecto de la Liga de eSports en los colegios

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha felicitado este miércoles al Gobierno de Canarias por su apoyo al sector de los videojuegos, pero también ha pedido “repensar que los niños estén una hora jugando con ellos en el colegio”.

Durante su intervención en el foro que organizan los diarios “La Provincia” y “La Opinión de Tenerife”, Maroto ha sido interpelada por el público sobre la iniciativa del Gobierno de Canarias de crear una Liga de Videojuegos, o “eSports”, en la que participarían varios centros educativos públicos.

La ministra ha subrayado que ella es una firme defensora de la industria del videojuego y también ha reconocido que este tipo de productos pueden utilizarse en la enseñanza, pero de una forma controlada, que se oriente a estimular “la creatividad” en los alumnos.

Por eso, ha felicitado explícitamente al Gobierno de Canarias por apoyar a la industria del videojuego y facilitar el crecimiento de este sector productivo en las islas, algo que, ha recordado, ella demandó a la Comunidad de Madrid cuando era diputada del PSOE en la Asamblea madrileña.

“Es importante trazar cuáles son las fortalezas que puede tener Canarias para atraer inversiones y una de ellas es este sector”, ha señalado.

Sin embargo, de inmediato ha matizado: “Que nuestros hijos estén una hora en el colegio jugando a los videojuegos, eso lo tenemos que repensar. Tenemos que ayudar a nuestros hijos a fomentar la creatividad”.

Reyes Maroto ha recalcado que ella apoya el consumo de videojuegos, tanto educativo, como de ocio, “porque, si no, no existiría esta industria”, pero ha opinado que su papel en la enseñanza debe orientarse a la creatividad.

“Que a los niños se les estimule en actividades que tienen que ver con el videojuego, con el emprendimiento, es importante, siempre y cuando se controle que lo que se les enseña a los niños es a crear”, ha abundado la ministra de Industria, partidaria de enseñar a los chicos lo que hay “en el corazón de los videojuegos” para que luego los entiendan mejor cuando jueguen con ellos.