Todos los grupos del Parlamento de Canarias, excepto Sí Podemos, han apoyado este miércoles una proposición no de ley para pedir al Gobierno español que garantice la financiación para los trenes de Tenerife y de Gran Canaria y los incluya en la Red Ferroviaria de Interés General.
En la proposición, que fue promovida por el diputado del grupo Mixto Ricardo Fernández de la Puente, de Ciudadanos, se pide además que el Ejecutivo central tenga en consideración ambos proyectos de tren dentro de la Estrategia Indicativa del desarrollo, mantenimiento y renovación de la infraestructura ferroviaria.
Fernández de la Puente explicó que ha decidido tomar la iniciativa para que el Parlamento respalde ambos proyectos ferroviarios que, en su opinión, contribuirían a un transporte sostenible, a la reducción del impacto ambiental y beneficiarían la movilidad de la población como alternativa al transporte por carretera. El diputado afirmó que ya desde 2009 se han materializado convenios de colaboración entre la Administración General del Estado y el Cabildo de Tenerife en materia de ferrocarriles, y durante la última década se han invertido casi 26 millones de euros en los proyectos del tren del sur y del norte, que figuran en los activos de Metropolitano de Tenerife, añadió.
Añadió que el Cabildo de Gran Canaria ha planificado la implantación del tren al considerar necesario disponer de una red ferroviaria para mejorar la movilidad en el corredor este de la isla, que suponga un complemento importante y una alternativa real al transporte por carretera con el consiguiente beneficio en términos de circulación y de impacto ambiental.
La parlamentaria del PP Luz Reverón defendió la “coherencia” de su partido en este ámbito, al contrario que “otras formaciones” que, dijo, han cambiado de postura “por mantener los sillones”, en los que también están pensando “los comunistas” que con “doble rasero” apoyan el tren en una isla y no en la otra, en alusión a Podemos.
Al respecto, el portavoz de Sí Podemos Canarias, Manuel Marrero, observó que la diputada popular “apela nuevamente al fantasma del comunismo en un tren al que lleva mucho tiempo subida”, para afirmar a continuación que los trenes son competencia de los cabildos y estos no han concluido sus planes insulares de movilidad, por lo que no entiende que se quiera caminar “hacia el tren” sin tener aún un diagnóstico.
Además, ha comentado que hay “alternativas posibles” como las guaguas eléctricas, planes de movilidad de las empresas o el uso de las nuevas tecnologías y, en el caso concreto de Tenerife, los carriles BUS-VAO frente al tren, que tiene “contestación social”. De hecho, la moción en el Cabildo insular para impulsarlo fue retirada al no lograr el consenso de los grupos y tras afirmar el presidente, Pedro Martín (PSOE), que no era “el momento”, dada la situación actual de crisis derivada de la COVID y el elevado coste (más de 2.500 millones de euros).
Marrero ha defendido, sin éxito, una enmienda en la que pedía esperar a que los cabildos finalizaran sus planes de movilidad.
Jesús Ramos, de la Agrupación Socialista Gomera, defendió ambos proyectos ferroviarios como una apuesta por el progreso sostenible, y no dudó de que el Gobierno de Canarias podrá captar fondos estatales y europeos para impulsar ambos trenes, aunque también subrayó que cabildos y ayuntamientos deben ser “escuchados”.
Por Nueva Canarias la parlamentaria Carmen Hernández aseguró que apostar por los trenes es hacerlo por la modernidad y la sostenibilidad, opinó que el carril BUS-VAO “es un parche”, y consideró que “si queremos quitar coches de las carreteras sólo hay un camino: el tren”.
Al diputado del grupo Nacionalista Canario Lucas Bravo de Laguna le pareció “mentira” que “a estas alturas de la película” no haya un acuerdo sobre estas infraestructuras, criticó “la inacción” del Gobierno canario que, añadió, no le “vale” a que esté motivada por el rechazo al tren en Tenerife por parte de Podemos, que sí lo apoya en Gran Canaria.
Sobre esta cuestión subrayó que apoya ambos proyectos pero puntualizó que si en Tenerife no se llega a un acuerdo respecto al tren, el de Gran Canaria tiene que seguir adelante o de lo contrario habría “un fracaso estrepitoso” por parte del Gobierno autonómico.
El diputado socialista Jorge González se mostró de acuerdo en que la Comunidad Autónoma tendrá que captar fondos para ambos proyectos, y señaló que los trenes ayudarán al objetivo de la transición ecológica en el archipiélago y a resolver los problemas de movilidad en las islas de mayor población con un transporte “rápido, sostenible y seguro”.