Claves del informe PISA en Canarias: el bajo nivel económico y cultural de las familias condena a peores resultados

“Se considera que un sistema educativo es más o menos equitativo en función de en qué medida es capaz de conseguir que el rendimiento de sus estudiantes dependa de sus capacidades y no de circunstancias definidas por su contexto social, económico y cultural”. Así encabeza uno de los apartados el informe PISA 2018, publicado este martes. Se trata de una máxima que no se cumple en Canarias, donde las desigualdades de su población vuelven a condenar a peores resultados en estas pruebas, que además este año viene marcada por la exclusión del examen de lectura por irregularidades.

Canarias tiene un índice socioeconómico y cultural (ISEC) de -0,39, muy alejado de la media de España, que se encuentra en -0,12. Para calcularlo, se tiene en cuenta información como la ocupación profesional y el nivel educativo de los padres y madres, así como con los recursos disponibles en el hogar (por ejemplo, número de libros, dispositivos digitales…).

El índice ISEC en la media de la UE es -0,04, muy alejado del de Canarias. Una diferencia que se acentúa si se compara con países como Islandia, donde la media es de 0,55. Solo se encuentran por detrás de las Islas, Murcia (-0,41), Ceuta (-0,60) y Melilla (-0,61). Si cruzamos estos datos con otros informes como el de Foessa para Cáritas o la tasa AROPE, se constata que el 29% de la población canaria está en riesgo de exclusión social, la cifra más alta de España. Estatus socioeconómico y cultural y resultados académicos están muy vinculados y así lo vuelve a recoger este año PISA.

El contexto es crucial para analizar este informe que vuelve a reflejar la brecha entre las comunidades del norte y sur de España, que a su vez son las que presentan mayor y menor riqueza. El alumnado de Canarias ha obtenido una de las peores puntuaciones del país en Matemáticas y Ciencias, con 460 y 470 puntos. No obstante, todo el conjunto nacional se encuentra estancado en estas pruebas. La comunidad que mayor puntuación ha obtenido en estos dos exámenes es Navarra con 503 puntos en Matemáticas o 592 en Ciencias. Por la cola, el Archipiélago obtiene resultados similares a Extremadura (470-473) o Andalucía (465-471).

Insuficiente financiación

Se da la circunstancia de que la inversión de los gobiernos autonómicos en Educación también es clave en los resultados. A menor inversión, peores resultados y Canarias aún no llega a destinar el 4% del PIB a Educación. El Gobierno regional se ha comprometido recientemente a que esta inversión crezca de manera progresiva para que en 2022 sea una realidad que el 5% del PIB se destine a esta área, como manda la ley canaria educativa. De momento, comunidades como Castilla y León, con más gasto educativo, obtiene mejores puntuaciones.

Canarias presenta una mayor tasa de estudiantes que repiten curso, después de Ceuta y Melilla, y se sitúa en un 35.6%. No obstante, la cifra ha descendido en los últimos años, ya que en el informe PISA anterior, con datos de 2015 era de un 38%.

En cuanto a la elección del centro educativo, el estudio detalla que depende más de los recursos económicos familiares que de las necesidades educativas del alumnado. en Canarias, las diferencias de resultados entre los públicos y los privados es de 60 puntos en la prueba de Ciencias y de 32 en el examen de matemáticas. Sin embargo, la diferencia de resultados radica de nuevo en esa desigualdad económica que existe en los estudiantes que acuden a uno u otro centro.

Datos sobre género y acoso escolar

Uno de los apartados más llamativos del último informe PISA es la diferenciación por género. En líneas generales, las chicas dicen experimentar mayor “miedo al fracaso”. Además, los jóvenes de las familias desfavorecidas son menos susceptibles de encontrar trabajo que ellas. Hay más chicas que chicos que se gradúen en estudios terciarios y son ellos los que presentan un porcentaje más alto de abandono escolar.

Otros datos de interés son: ellas suelen leer más por placer, dedican más tiempo a hacer las tareas escolares y utilizan los dispositivos para realizar actividades sociales, mientras que ellos usan estos aparatos para jugar en línea o leer noticias. En cuanto a las expectativas sobre el futuro profesional, ellas esperan ejercer cuando tengan 30 años profesiones como médica, abogada o profesora y ellos policía, deportista o ingeniero. Los datos se extrapolan también a Canarias donde también existe esta diferenciación por género.

España es uno de los países donde sus estudiantes se encuentran menos expuestos al acoso escolar. “Todas las comunidades autónomas muestran valores negativos del índice de exposición al acoso entre estudiantes de 15 años de edad, siendo Extremadura, Castilla y León y La Rioja, las tres comunidades con menor índice de exposición al acoso”. Canarias se encuentra a la mitad de la tabla y es una región donde no se observan diferencias significativas entre chicos y chicas en lo que se refiere a la exposición al acoso entre iguales.