El Gobierno retiene desde hace meses más de 13 millones de euros para la reposición de viviendas en Las Palmas de Gran Canaria
No es la primera vez que el Gobierno de Canarias llega a un acuerdo con el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y, a la hora de la verdad, le cuesta cumplir con su parte del trato. Durante este mandato (2015-2019) se han firmado varios convenios. La transferencia de los fondos para la reposición de viviendas sociales en el barrio de Tamaraceite, después de que el Consistorio las prefinanciara, es uno de ellos. Pero el Ejecutivo no acaba de concluir el pacto y no ha transferido al consistorio el dinero para continuar las obras, a pesar de que cuenta con esa partida desde antes de la salida del Partido Popular del Gobierno central. Así se lo hicieron saber al concejal de Urbanismo de la ciudad, Javier Doreste, en una reunión mantenida con las autoridades políticas en Madrid. “Tienen el dinero y no sabemos por qué no nos lo dan para continuar las obras”.
Durante este mandato se ha llevado a cabo la remodelación de inmuebles en Tamaraceite. Debido al mal estado en el que se encontraban, muchos edificios construidos en los años 60 del siglo XX han sido demolidos y sus vecinos trasladados a casas de alquiler. El Ayuntamiento es quien se ha hecho cargo de las obras con fondos de la Comunidad pero, desde 2018, no recibe ni un euro. Algo que le impide finalizar los 73 inmuebles que le falta para completar la construcción enmarcada dentro del Área de Renovación y Regeneración Urbana (ARRU) de Tamaraceite.
El asunto está en que, a pesar de tener los fondos, el Gobierno autónomo no ha pagado las últimas promociones de viviendas hechas en el barrio capitalino. “Hemos ido prefinanciando todo, tenemos los solares, tenemos los proyectos para continuar las obras, solo nos falta sacarlas a concurso para acabar con la reposición, pero no tenemos el dinero”, indica Doreste. El edil asegura que con nueve millones se finalizaría la construcción de estos 73 inmuebles. “Hemos prefinanciado casi 14 en los últimos edificios, pero solo hacen falta nueve millones para terminar en Tamaraceite de una vez”, insiste Doreste.
Normalmente el Ejecutivo transfería estas partidas cuando estaba finalizando el año, en los meses de noviembre y diciembre, pero en 2018 no llegó ese dinero. “Nosotros adelantamos el dinero para que después el Gobierno nos ingrese, pero no podemos prefinanciar indefinidamente y que nunca nos transfieran”, reitera. Con los fondos abonados en 2017 se pagó lo que se había hecho hasta ese momento y se adelantó el dinero para las que se hicieron a lo largo de 2018. “Para las 73 que nos quedan, el Ejecutivo tendrían que darnos lo que hemos adelantado y con eso dejamos la obra encaminada”, explica el concejal. “Solo quiero que paguen lo que deben para acabar, para que estas 73 familias vean un futuro cercano”.
El concejal asegura que la respuesta del Gobierno ante estas peticiones es la indiferencia. “Cuando preguntamos no contestan”. Doreste afirma que desde el Consistorio han pedido cita en varias ocasiones pero no reciben respuesta del Ejecutivo, algo que les llama la atención porque “había muy buena relación con la Dirección General de Vivienda”.
La reposición de viviendas de Tamaraceite se ha dividido en diferentes etapas. En la época en la que Jerónimo Saavedra fue alcalde (2007-2011) se hicieron 28; en el siguiente mandato llegó Juan José Cardona (2011-2015) y empezó la construcción de 72 que “dejó a medias”, señala el concejal, y fueron finalizadas en el actual. En estos momentos hay 83 viviendas en trámite de entrega a los vecinos; 37 que se están finalizando y 59 en construcción. Quedan 73 por sacar a concurso y prefinanciar para dar por finalizada la reposición.
A todo esto, desde la Dirección General de Vivienda aclaran que la próxima semana se van a reunir con el Ayuntamiento “para ultimar los acuerdos del convenio”. “El dinero está y lo único que se tiene que firmar es el convenio para hacer la transferencia”, señalan. De producirse el acuerdo será cinco meses después de lo habitual, con un nuevo ejercicio en medio y un mes antes de las elecciones autonómicas.
La vivienda social, el problema sin fin en Canarias
Ha llovido mucho desde la última vez que el Gobierno de Canarias construyera una vivienda social en Gran Canaria. Según Doreste, desde 2008 el Ejecutivo regional no construye “ni un solo inmueble” en la isla. Las últimas que se hicieron pertenecen al Plan de Vivienda de Canarias 2009-2012, período en el que quedó paralizada la construcción debido a la crisis económica. “En la ciudad solamente se terminaron y se entregaron dos promociones que estaban paradas hacía muchos años, con Patricia Hernández”, explica el concejal.
A nadie se le puede esconder que en Canarias hay un grave problema de vivienda, con más de 13.000 demandantes. En la capital grancanaria muchas familias se han visto en la calle sin saber a qué puerta tocar, mientras las administraciones debaten sobre la posibilidad que existe de construir o no nuevas viviendas. Desde el ayuntamiento insisten en que tienen espacio para edificar 8.000 casas. Una afirmación que nada tiene que ver con la del Ejecutivo regional, donde aseguran que en la ciudad, ahora mismo, solo hay espacio para algo más de 140. En relación a esto, señalan que el Gobierno “ni está ni se le espera”. “Siguen pidiendo terrenos pero no presentan un proyecto”, lamenta el concejal de Urbanismo.