Los ayuntamientos recibirán más fondos para contratar parados
Los ayuntamientos de Cantabria seguirán contando en 2016 con fondos para contratar a parados, pero no serán los encargados de realizar los procesos de selección. El nuevo Gobierno regional PRC-PSOE ha decidido continuar con el programa impulsado por el anterior Ejecutivo del PP si bien, introducirá algunos cambios.
Por un lado, ampliará la partida económica, de modo que el número de contratados podría llegar hasta los 5.000, en vez de los 3.970 actuales. Además, incrementará la duración del contrato “para abarcar una mayor parte del año”. La idea es que los ayuntamientos tengan disponibilidad plena de este personal “desde la primavera al otoño”.
Por otro lado, los Consistorios perderán la competencia para realizar los procesos de selección. El nuevo Gobierno no quiere que se repita la historia de este año, en el que Cantabria ha perdido una subvención de 14 millones de euros procedente de la Unión Europea para financiar el programa debido a la arbitrariedad de las Administraciones locales en la selección de los nuevos trabajadores, lo que también despertó las sospechas e indignación de muchos vecinos. Por ello, a partir de 2016 será el Servicio Cántabro de Empleo el que se encargue de la elegir al personal.
Así lo ha avanzado este miércoles el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, tras mantener un encuentro con el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, quien ha calificado como una “excelente noticia” la reedición de la convocatoria y ha expresado su apoyo a que se hagan todos los cambios “que haya que hacer” para garantizar la seguridad jurídica de las bases.
En su intervención, Sota ha destacado que uno de los objetivos “fundamentales” del Gobierno de Cantabria es el empleo, “y colaboraremos con los ayuntamientos en la medida de lo posible”, ha apostillado.
La Orden de Corporaciones Locales, que así se denomina este plan, fue puesta en marcha por el Gobierno de Ignacio Diego durante la pasada legislatura como una forma de aliviar las cifras del paro y “dar un colchón” a las personas en situación de desempleo, a las que se contrataba por un periodo de seis meses en diversas actividades, en función de los proyectos presentados por los ayuntamientos.