La sanidad privada en Cantabria goza de buena salud, según el último informe publicado en mayo por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FASDP) sobre la privatización sanitaria en las autonomías. Precisamente, una de las conclusiones más relevantes para FASDP son los movimientos en cuanto a mayor privatización de comunidades como Cantabria, que ha escalado seis puestos en el ranking nacional, pasando del grupo de autonomías con menor grado de privatización a un grupo intermedio.
El grado de privatización de la sanidad cántabra ya supera al de Galicia, País Vasco, Castilla-La Mancha, Extremadura y Navarra, según los datos que ha recabado la federación del Ministerio Sanidad, INE, IDIS (Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad) y Barómetro Sanitario. En España hay tres grados de privatización por autonomías: con un mayor grado de privatización están Madrid, Baleares, Cataluña y Andalucía; con un grado intermedio de privatización, Aragón, Valencia, Asturias, Canarias, Murcia, Castilla y León, Cantabria, Galicia y País Vasco, por este orden; y con menor grado de privatización, Castilla-La Mancha, Extremadura y Navarra.
Aunque el auge de la sanidad privada es generalizado en todo el país, la subida en Cantabria ha coincidido con la llegada al poder autonómico del PP en 2023. Una de las causas que se achacan a esta subida es al alarmismo que se está generando en la población por cuestiones como las listas de espera quirúrgicas, de consultas y para pruebas diagnósticas, con un intercambio público de continuo de valoraciones contradictorias entre los partidos políticos. Los partidos ni siquiera están de acuerdos en el censo de pacientes a la espera, lo que ha llevado al Defensor del Paciente a poner la cuestión en manos de la Fiscalía para que lo investigue.
Cantabria ha visto sobredimensionados estos listados ya desde la gestión del PSOE, pero aún siguen con altos porcentajes. El Gobierno del PP ya ha anunciado 65 millones de inversión para reducir las listas de espera, en buena parte destinados a la medicina privada.
Miedo y deterioro de lo público
Los expertos consideran que ello ha impulsado a numerosos cántabros a pagar consultas y contratar seguros privados ante la posibilidad de ver demorada la atención sanitaria, una dinámica que entronca con la 'Sanidad Business' que defendía el actual consejero de Salud, César Pascual (PP), y que le granjeó las críticas de la oposición política, sobre todo socialista. “O te pones a la cola, o copago” fue la expresión utilizada por Pascual.
“Los recortes y el deterioro de la Sanidad Pública han sido y continúan siendo el principal incentivo para el crecimiento del sector privado, y por eso es una de las estrategias utilizadas para favorecer la privatización” es una de las conclusiones de la Fundación.
Por su parte, el secretario general del PSC-PSOE, Pablo Zuloaga, ha denunciado recientemente que el incremento de los seguros privados es el mayor peligro que afronta ahora la sanidad pública en Cantabria.
Cantabria es “la comunidad autónoma donde más crecen los seguros privados en el ámbito de la salud en las familias”, lo que, en opinión de Zuloaga, es un dato “grave y peligroso” porque “acredita que la ciudadanía de Cantabria empieza a desconfiar de un Gobierno que gestiona la sanidad pública pensando que los pacientes son clientes”.
Los recortes y el deterioro de la Sanidad Pública han sido y continúan siendo el principal incentivo para el crecimiento del sector privado, y por eso es una de las estrategias utilizadas para favorecer la privatización
Entre los datos obtenidos por FASDP, está el gasto sanitario que se destina a seguros privados: 109 euros al año por cántabro (la media autonómica española es de 178 euros).
Además hay que tener en cuenta el gasto de 499 euros de media anual de cada cántabro en consultas privadas, sobre todo en odontología, frente a los 504 euros de media nacional.
El gasto sanitario que se destina a seguros privados: 109 euros al año por habitante, mientras la media autonómica de España es de 178 euros
El número de consultas con especialistas por habitante y año y por cada 1.000 habitantes arroja un ratio de 0,05, muy por debajo de la media autonómica, que es de 0,47. Sin embargo, las consultas al médico de cabecera privado no tienen nada que envidiar a las del resto del territorio nacional: 22,3 cántabros de cada 1.000 lo han hecho el último año (24,75 es la media nacional).
Por otra parte, el porcentaje de población cubierta por mutualidades de funcionarios que han elegido la asistencia privada es del 3,8% del total de Cantabria, frente a una media nacional que es del 3,61%.
Para la elaboración del informe se han utilizado datos de población cubierta por seguros privados de las mutualidades de funcionarios (Barómetro Sanitario), el gasto sanitario per cápita en seguros privados (IDIS), el gasto sanitario de bolsillo (pagos por consulta) per cápita (INE), porcentajes del gasto sanitario dedicado a concertación con centros privados (Ministerio Sanidad), de camas hospitalarias privadas sobre el total (MS), del equipamiento de alta tecnología en hospitales privados sobre el total (MS) y el número de consultas anuales a especialistas del sector sanitario privado por cada 1.000 habitantes (MS). También se ha tenido en cuenta el porcentaje de personas que han acudido al médico general privado en el último año (Barómetro Sanitario). No obstante, los datos no son todo lo homogéneos que debieran debido a la falta de transparencia de las administraciones públicas, matiza FASDP, si bien concluye que esto no invalida los resultados, sobre todo uno: la sanidad privada sigue al alza en el país.
“Hay que ser conscientes de que las cifras de contratación del sistema público con el sector privado están infraestimadas por dos motivos: la presencia del modelo de las mutualidades de funcionarios, que en su mayoría dedica fondos públicos a financiar seguros privados, y luego porque existen muchos casos de contratación directa de los centros sanitarios con el sector privado (pruebas diagnósticas, etc.) con lo que estas partidas no aparecen contabilizadas de manera diferenciada y se incluyen en los presupuestos de los centros públicos”, ha concluido la organización que ha publicado el informe.
Leyendas:
- Mutuas: Porcentaje de población cubierta por Mutualidades de Funcionarios que ha elegido la asistencia privada (en % sobre población total).
- GS Seg Priv.: Gasto sanitario en seguros privados (€/año).
- GS Bolsillo: Gasto sanitario de bolsillo per cápita (€/año).
- GS Conc. privados: Porcentaje del gasto sanitario dedicado a contratación con centros privados.
- Camas privadas: Porcentaje de camas hospitalarias privadas sobre el total.
- AT privad.: Porcentaje del equipamiento de alta tecnología en hospitales privados sobre el total.
- Ctas. Esp. Priv.: Consultas por habitante y año a especialistas del sector sanitario privado/1000 habitantes.
- Ctas. Med. Gral. Priv.: Porcentaje de personas que acudieron a consultas del médico de cabecera privado.