El PRC exige nuevas condiciones para garantizar la estabilidad del gobierno de coalición con el PSOE en Cantabria

El PRC pedirá al PSOE, su socio de Gobierno en Cantabria, “respeto institucional” al presidente autonómico, Miguel Ángel Revilla, y que reivindique ante el Ejecutivo de Pedro Sánchez los compromisos pendientes con la comunidad. “Sin eso no puede haber Gobierno”, ha advertido el líder regionalista, que ha respondido así al ultimátum lanzado hace unos días por los socialistas: “Esto no es un órdago. Si no se acepta, no hay gobernabilidad posible”, ha insistido.

Así lo ha avisado el secretario general del PRC y presidente cántabro en una rueda de prensa celebrada este jueves en Santander, después de que el PSOE de Cantabria decidiera continuar en el Gobierno bipartito tras haber amenazado con dar por “roto” el pacto si los regionalistas votaban 'no' a la investidura de Pedro Sánchez, como finalmente hizo el diputado nacional del PRC, José María Mazón, en dos ocasiones.

Revilla ha explicado que esas dos cuestiones se llevarán a la reunión de la comisión de seguimiento del pacto, que ha propuesto que se celebre el próximo lunes, y confía en que el PSOE las acepte porque, de no ser así, considera que no pueden seguir gobernando juntos.

También ha pedido al PSOE, en concreto a Pedro Sánchez, que “entienda y respete” la decisión del PRC de votar 'no' a la investidura y ha advertido a los socialistas que “no se les ocurra tomar represalias” en cuanto a los compromisos con Cantabria porque, si lo hacen, “sería muy grave”. “No nos asusta nada. Que no tomen represalias, que no me enfaden, que no me enfaden”, ha advertido.

“Tenemos que analizar en qué circunstancias puede seguir esta coalición, porque yo no estoy dispuesto a gobernar con un partido que ponga en duda la fidelidad y la obediencia al presidente de Cantabria, que es una institución. Lo dice el Estatuto de Autonomía. Estar en coalición para encontrarme todos los días con que hemos sido unos traidores, con que hemos engañado a la gente… no. No hemos engañado a nadie”, ha señalado Revilla.

Durante su comparecencia, el presidente cántabro se ha mostrado muy molesto con el comportamiento de su vicepresidente, el secretario general del PSOE de Cantabria, Pablo Zuloaga. “Yo, si no me garantizan la estabilidad, no. No quiero sainetes. Ya tuve un sainete a media legislatura anterior, cuando rompieron el Gobierno. Acepté en parte por el bien supremo de Cantabria, pero no quiero más sainetes ni bromas de estas. No puedo estar en un sobresalto permanente”, ha recalcado.

Ahora, según ha explicado Revilla, su partido va a reclamar al PSOE tras los últimos acontecimientos y la crisis interna en la que están inmerso, un “replanteamiento” del pacto de gobierno que le convirtió en presidente el pasado verano con dos exigencias: respeto institucional al presidente y que el PSOE se convierta en la “vanguardia reivindicativa” junto con el PRC de las peticiones que están firmadas con el Gobierno de España.

“Es de sentido común que si nosotros vamos a seguir gobernando con alguien haya un respeto hacia el presidente y haya un compromiso de seguir reivindicando las cosas que requiere Cantabria. Si no, ¿qué sentido tiene? No creo que ni ellos quieran estar ahí en esas circunstancias solo por mantener el puesto. Que se suban al carro de las reivindicaciones y que al presidente, como institución que soy, se le respete”, ha considerado Revilla a preguntas de los periodistas.

Revilla ha relatado también que este jueves se ha celebrado con “normalidad” el primer Consejo de Gobierno en Cantabria tras la investidura de Pedro Sánchez, una reunión en la que se han tramitado “por unanimidad” todos los puntos del orden del día y en la que ha coincidido de nuevo con sus socios en el bipartito, tras la “amenaza” que habían lanzado de abandonar el Ejecutivo autonómico como consecuencia de la “traición” del PRC.

Aunque esta misma mañana los dos socios del bipartito se han visto en el Consejo de Gobierno, Revilla ha asegurado que no se ha hablado del asunto porque ahí “no se habla de política sino de Cantabria” y ha desvelado que su única conversación sobre ello con el líder del PSOE cántabro, Pablo Zuloaga, tuvo lugar el pasado viernes: “Me vino a plantear el órdago y la cosa duró un minuto, me puse de pie y le abrí la puerta”.

Según ha explicado el presidente autonómico, en el Gobierno que lidera “no hay colores ni partidos, solo Cantabria”. Además, Revilla ha reconocido que en los últimos días no ha tenido “ni un minuto de insomnio” a pesar de la crisis interna con los socialistas porque “la gobernabilidad de Cantabria está garantizada se queden o se vayan” y “no peligra para nada”.

“Estábamos preparados para, si rompían el pacto, barajar varias opciones: podemos gobernar en solitario, podemos buscar colaboración y hacer lo que Pedro Sánchez llamaba Gobierno de cooperación con otros y, si en un momento determinado, imaginemos que dentro de un año, vemos que esto es ingobernable, hay un instrumento muy democrático que tienen todos los presidentes, que es convocar unas elecciones”. “Es lo último que se debe de hacer, pero si no hay estabilidad… existe esa opción”, ha deslizado.

Agenda social

Revilla ha utilizado casi 40 minutos de la hora larga en la que ha comparecido ante los medios para justificar el 'no' de su partido a Sánchez, un cambio de rumbo de los regionalistas que en verano habían sido el único apoyo externo del PSOE en la investidura fallida.

A pesar de ello, el presidente cántabro ha asegurado que desea “fervientemente” que el Gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos “salga bien”. “Lo deseo con toda mi alma, pero tengo dudas porque no tiene pinta de ser muy estable”, ha dicho, añadiendo que no es “optimista”.

También ha avanzado que hay asuntos en los que el Gobierno “contará con el voto de Mazón” como en los asuntos de “la agenda social”, entre los que ha hecho referencia a las pensiones, la dependencia, la discapacidad o la lucha contra la violencia de género, así como en los Presupuestos Generales del Estado “si incluyen las obras de Cantabria”.

En este sentido, el líder del PRC ha señalado que está oyendo “cosas que asustan y que son impropias de un dirigente político” como es decir que “puede haber represalias” por el 'no' de su partido a la investidura, afectando a los compromisos del Estado con la comunidad autónoma y que Revilla ha reiterado que “son reivindicaciones históricas”.

Presiones al PRC

Además, el presidente de Cantabria y secretario general del PRC ha aprovechado la rueda de prensa para negar que haya recibido “presiones de nadie” para que el diputado nacional de su partido votase 'no' en la investidura, una postura que ha recordado que fue adoptada por la Ejecutiva regionalista de común acuerdo y tras conocer los detalles del acuerdo del PSOE con ERC.

“Yo no he recibido presiones de nadie y, si he recibido presiones de alguien, ha sido del PSOE, que ha llegado a amenazar con que, si votábamos 'no', rompía el Gobierno”, ha enfatizado Revilla, al tiemo que se ha mostrado “muy disgustado” con las informaciones que dicen que habría recibido presiones de la presidenta del Banco Santander, Ana Botín.

Asimismo, ha recordado que él ya avisó que “un tren no vale que se ponga en riesgo la unidad de España” por lo que el PRC ha sido “coherente” con ello tras conocer el acuerdo con Esquerra, que “ni cita la Constitución y está redactado para que no se entienda nada, con ”muchas ambigüedades que parece que no dicen nada pero que pueden dar lugar a todo“.

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Apoyo de Sánchez

De manera simultánea a la comparecencia de Revilla, y después de que la Ejecutiva del PSOE cántabro decidiera dar marcha atrás en su órdago y mantenerse en el Gobierno, el vicepresidente socialista y secretario general del partido a nivel autonómico, Pablo Zuloaga, ha asegurado que Pedro Sánchez “apoya y respalda cada uno de los pasos dados” en la comunidad, tanto el ultimátum del pasado viernes en el que daba por “roto” el bipartito si su socio votaba 'no' en la investidura, como la reciente decisión de continuar adelante con la coalición.

Y lo ha dicho como portavoz del Ejecutivo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en el que, tal y como ha señalado a preguntas de la prensa, no se ha abordado “nada” relacionado con la crisis del bipartito en los últimos días. Sin embargo, sí ha subrayado que “al PSOE no hace falta que nadie le marque el camino sobre los compromisos que el Gobierno de España tiene que adquirir con Cantabria” y ha señalado que “nadie” le va a dar “lecciones de lealtad”.