'Bodas de Sangre' plantea la lucha de valores convertidos en leyes frente a la libertad individual
La obra 'Bodas de Sangre', protagonizada por María Vidal, llega a La Teatrería de Ábrego este próximo viernes 14 y sábado 15 de octubre enmarcada dentro del Festival 'Mujeres que cuentan'.
Tras su reciente participación en festivales de Francia, Bélgica, Bulgaria y Emiratos Árabes, esta versión de 'Bodas de Sangre' con dramaturgia de Pati Domenech, se presenta en 'Mujeres que cuentan', “aportando así, una dimensión local a esta muestra que reúne a creadoras de nueve países de todo el mundo”, destacan los organizadores.
Después de un comienzo marcado, según los propios promotores, por el éxito de público que abarrotó las dos primeras sesiones del estreno absoluto de 'Auto Retrato Inerte', de Xandra Orive y la única función de 'Apuntes sobre la Frontera' de la performer de prestigio internacional Violeta Luna, Ábrego presenta en su propio foro este original montaje.
Gracias a él ha recibido importantes reconocimientos internacionales, tales como el ser considerado el Mejor Espectáculo Unipersonal en el Festival Iberoamericano de Mar del Plata, en Argentina, en 2014.
Estrenada en el Instituto Internacional de Arte Teatral (IATI) de Nueva York, la obra esta coproducida por Ábrego y Desdelsur Teatro (Argentina), y en ella se plantea el enfrentamiento visceral entre los valores rígidamente convertidos en leyes y la inútil y sangrante lucha de alguien que perteneciendo a esa sociedad que los sustenta, pelea por conservar una pequeña parcela de libertad individual.
“Deslegitimizar la violencia política, de género o su uso como licencia poética es la primera reflexión que plantea”, destaca la organización. La propuesta parte de un proceso de investigación del “universo lorquiano” para construir un trabajo escénico innovador, señalan.
Como en todas las dramaturgias de Pati Domenech, escritas para la escena más que para su lectura, “se busca la independencia de la creación escénica respecto de la literatura dramática, para así devolver al escenario la función integradora que remite a las originarias fuentes del teatro”.
Así como Lorca logra llegar a un público apartado de la estética teatral, presentándole los problemas fundamentales de la sociedad española del momento, mediante el recurso de la farsa, la comedia, la ironía o el drama, que fueron causa de los escándalos y polémicas más sonados de la época, Ábrego plantea el objetivo de recrear la historia en que se basó el poeta, haciendo un trabajo vivo y accesible a la audiencia contemporánea en términos relevantes para nuestra época.
“Es así como la puesta en escena tiene una función creativa y crítica, es decir, presentar ideas y plantear preguntas que son importantes para la actualización del mito en su nuevo contexto”.
En este espectáculo interdisciplinar en el que se conjugan el cante, la danza flamenca y contemporánea, la interpretación actoral y las videoproyecciones, tres historias trágicas se entrelazan. La de las personas que generaron la noticia en que se inspiró Lorca en 1928, , las de la madre, la luna y la novia del drama lorquiano y la del mismo Federico, como actor principal de un drama que finaliza con una muerte obscena y absurda.
María Vidal realiza en este montaje un “trabajo extraordinario de recreación de los diferentes personajes femeninos de la obra”. Licenciada en Arte Dramático por el Real Conservatorio de Teatro y Danza de Sevilla, ha conseguido junto a Pati Domenech dotar de dimensión internacional al teatro hecho en Cantabria, manteniendo una presencia continuada en escenarios de ciudades como Buenos Aires, Nueva York, La Habana, Viena, Berlín, Estrasburgo, Santiago de Chile y un largo etcétera que abarca festivales y muestras de Europa, Asia, África y América.