Así ha sido la despedida colectiva de viajeros y viajeras al histórico tren Madrid-Cuenca-Valencia

A las 19.00 horas de este martes llega a la estación de Cuenca el último tren de la línea convencional que une esta ciudad con Madrid y València. Será el final de 140 años de una línea de ferrocarril que ha vertebrado la provincia, una de las que conforman la España vaciada y que ha provocado el rechazo social y político al Plan X Cuenca del Gobierno de España que ha incluido su cierre. En su lugar, habrá autobuses, líneas regulares y nuevos trenes AVANT, pero no ha sido suficiente para evitar que desde los colectivos sindicales, sociales y políticos sigan criticando esta decisión y que muchos pueblos de la provincia hayan decidido llevar esta cuestión a los tribunales. Pero mientras tanto, los viajeros y viajeras le han dicho adiós al tren.

Durante los últimos días, en el grupo de Facebook creado para usuarios y usuarios del Tren Regional Madrid-Cuenca-Valencia, se han compartido decenas de vídeos y fotografías sobre este recorrido, algunos para despedirse y otros para reivindicar que siga la lucha.

Por su parte, Yolanda Martínez Urbina ha viajado desde Aranjuez hasta Cuenca en el último tren convencional de esta línea. Como responsable de Reto Demográfico de AFAMMER ha dado visibilidad y escuchado la voz de familias, mujeres del colectivo ferroviario, turistas, jóvenes y mayores y niños también han tenido su palabra:

En paralelo, se han sucedido las reacciones de distintos colectivos y partidos políticos desde la provincia y toda la región. Mª Ángeles García Jiménez, concejala y portavoz del Grupo Municipal de ‘Cuenca, en Marcha!’ en el Ayuntamiento de Cuenca, ha vuelto a insistir en que las inversiones del Plan X Cuenca en la alta velocidad y en cuanto al desarrollo urbanístico de los terrenos de Adif son perfectamente compatibles con el mantenimiento del tren convencional. “¿Si el Plan X Cuenca es compaginable con trenes turísticos, por qué no lo es con el transporte de personas y mercancías?”, se ha preguntado.

 “Es delirante acabar con una infraestructura centenaria en un contexto de crisis energética y donde la Unión Europea está pidiendo precisamente lo contrario, que es apostar por el ferrocarril. Nos encontramos, por tanto, ante un agravio comparativo con otras provincias como Albacete y Toledo que ganan servicios ferroviarios, ya que no pierden el tren convencional”. Esta formación apoya las acciones judiciales emprendidas por la Plataforma en Defensa del Ferrocarril y Pueblos con el Tren con el fin de revertir el cierre de la línea y ha animado a la ciudadanía conquense a participar en la concentración que tendrá lugar esta tarde a las 19.00 horas en la estación del ferrocarril “para despedir al último tren con un hasta pronto y no un hasta siempre”.

Por su parte, el sindicato CCOO ha advertido que aún no está dicha “la última palabra” sobre el futuro de esta línea ferroviaria ya que el Ministerio de Transportes (Mitma) aún debe responder a las alegaciones elaboradas por el sindicato y presentadas por él mismo y por una docena de ayuntamientos que, afirman, sostienen que las actuaciones encaminadas al cierre de la línea “se realizaron sin base legal, por lo que todo el expediente debe ser anulado”. En caso de que las alegaciones sean rechazadas, CCOO acudirá al Tribunal Supremo para solicitar el control judicial de la decisión de clausura de la línea, han añadido, según ha informado CCOO en nota de prensa.

“Alineación política”

Ciudadanos Cuenca ha dicho que el cierre de la línea cuenta con el único aval de la “alineación política” del Partido Socialista en el Gobierno central, regional y local. Dicho cierre ha sido causado “por una decisión autócrata, de forma unilateral, carente de todas las garantías democráticas, y forzada con premura para liquidar una infraestructura con alto valor patrimonial, histórico y económico”, ha zanjado la portavoz de Cs en el Ayuntamiento conquense, Cristina Fuentes.

Y el presidente del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, se ha referido a esta cuestión apuntando que su formación “ha peleado y defendido” el mantenimiento del ferrocarril convencional pero que el PSOE ha hecho “caso omiso”, no solo a sus reivindicaciones sino a las del conjunto de los conquenses que se han manifestado para reclamar que no se eliminara.

Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, la valoración contraria la ha hecho el consejero de Fomento, Nacho Hernando. “No veo en el futuro un tren que tarda siete horas de Madrid a Valencia o de Valencia a Madrid y que en su tramo más concurrido lleva 37 pasajeros al día, con un coste de 10 millones de euros al año”. Defender la permanencia de este trazado, ha dicho, es “similar a decir que sigamos yendo en carro por calzadas romanas”.

El momento de la despedida

A eso de las 17.25 horas, el último tren llegaba puntual a la estación de Tarancón, donde aguardaba una decena tanto de viajeros como de curiosos que, cámara en mano, querían inmortalizar el momento. Allí se han montado en este último tren Lucía con sus hijos rodrigo y Guillermo. Mitad de Tarancón y mitad de Huete, esta familia ha querido aprovechar para viajar por última vez a bordo del tren regional hasta la localidad optense para reunirse con los abuelos, en un viaje que han llevado a cabo “con mucha pena y tristeza”.

Una situación que en el interior de los vagones se ha ido repitiendo. Con 69 viajeros ocupando los 166 asientos disponibles, todos los usuarios consultados por Europa Press han coincidido en lamentar la pérdida de este tren. “Es una pena”, “es una vergüenza”, “traición”, han explicado. Además, había viajeros habituales a quienes este último viaje no les ha parecido nada bien. Es el caso de Enrique García, natural de Vellisca aunque reside en Madrid desde hace tiempo. A sus 82 años, suele aprovechar el tren de forma habitual para viajar hasta su localidad y ahora lo que siente es “la mayor vergüenza del mundo” por este cierre.

A lo largo del recorrido ha habido gente que se ha bajado por última vez en Huete o en Chillarón, que se han subido en las mismas localidades para llegar hasta la capital de la provincia. Un viaje que, “de momento”, ya no volverán a realizar según han expresado.

En algo más de hora y media este tren ha llegado por última vez a Cuenca, donde en torno a medio millar de personas estaban esperándole. 'Queremos tren', 'sí al ferrocarril' o 'viva el tren' han sido algunas de las proclamas que se han podido escuchar junto a numerosas pancartas que reivindicaban este medio de transporte.