El proyecto de tierras raras es “incompatible” con especies protegidas como el lince ibérico
Finalizado el proceso de alegaciones al proyecto de minería de tierras raras presentado por la empresa Quantum en la comarca de Campo de Montiel, la Junta de Comunidades ha hecho pública una parte del informe medioambiental en la que se “pone de manifiesto” la incompatibilidad de la iniciativa con la presencia de diferentes especies en peligro de extinción. Así lo ha señalado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, si bien era un aspecto que ya había sido advertido por voces expertas y sociales ante la Unión Europea.
El informe se encuentra dentro de las 12.500 alegaciones que ha recibido según la Junta (unas 14.000, según la Plataforma Sí a la Tierra Viva). Martínez Arroyo ha querido “simplificar” la información del documento, dividiéndola entre dos apartados que ha considerado los más importantes: las referidas a las especies de la zona y la gestión del agua y del suelo. “El informe pone de manifiesto la incompatibilidad del proyecto con la presencia de especies en peligro de extinción como el milano real o el águila ibérica”, sentenció el consejero.
Peligro de los hábitats y de los animales
Se incluyen entre las especies también las aves esteparias, como las avutardas o los sisones, que se enmarcan en proyectos de recuperación LIFE de los que forma parte la Junta de Comunidades, en aquellas zonas donde hay agricultores de secano que “mantienen el hábitat”. De este modo, Martínez Arroyo ha asegurado que peligraría tanto la pervivencia del hábitat como la recuperación de las especies.
Lo mismo ocurre con el lince ibérico, especie con la que trabaja el programa LIFE+Iberlince y para los que se quieren instalar ahora corredores en los espacios en los que hay presencia de la especie. Dichos corredores pasarían por el lugar en el que se pretende llevar a cabo el proyecto. Textualmente, el informe asegura que el área de distribución de la empresa, la modificación de tierras o el tránsito de vehículos podría modificar el hábitat de la especie a largo plazo o, incluso, de forma permanente. “Esto vuelve a reiterarse porque la empresa no contempla la necesidad de preservar los espacios para especies protegidas”, afirmó Arroyo.
En cuanto al agua, el consejero ha señalado que la empresa ha estipulado su necesidad de agua entre los 80.000 y 100.000 metros cúbicos al año, una cantidad “importante” pero que depende de la Confederación Hidrográfica en cuestión, la del Guadiana. Pero, además, señalan que el proyecto podría provocar “graves problemas erosivos” en el caso de lluvias torrenciales, lo que amenazaría a los territorios ubicados agua abajo, incluido el pueblo de Torrenueva.
“Es un proyecto incompatible con la biodiversidad de la zona y el estudi es insuficiente y presenta varias carencias técnicas. Así se hace incompatible su autorización”, explicó Martínez Arroyo. Ahora la Junta deberá hacerse cargo del “traslado masivo” de alegaciones a la empresa, que deberá decidir si presenta un nuevo proyecto que sea compatible desde el punto de vista medioambiental. “Estamos siendo estrictos con el cumplimiento de la ley y siendo garantistas con quienes tienen interés del proyecto, los que alegan y la empresa”, afirmó el consejero.
Por último, Francisco Martínez Arroyo aseguró que la empresa deberá rehacer el documento para que haya una declaración de impacto ambiental positiva, sin la cual el proyecto no puede salir adelante. “Lo que tenemos ahora mismo encima de la mesa no es compatible”, concluyó.
