Sánchez Butragueño: “La principal amenaza para el patrimonio en Toledo es la situación del Tajo”
Eduardo Sánchez Butragueño (Toledo, 1977) ha sido elegido como el nuevo miembro numerario de la Real Academia de las Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo. El director de comunicación de la Fundación Soliss ostentará a partir de ahora, la medalla XXII, que perteneció al historiador Ramón Sánchez González y anteriormente a Gonzalo Payo Subiza, expresidente de Castilla-La Mancha. Salvo que sea cesado, explica entre risas, se trata de un cargo de por vida.
¿Conoces las razones de por qué fuiste elegido como miembro?
Es una trayectoria que se considera con una relación previa a la institución, desde marzo ya era académico correspondiente. Habiendo quedando vacante una de las sillas, pues decidí presentar mi candidatura y por suerte en la votación celebrada fue aprobada.
¿Qué significa este paso?
Un inmenso honor y orgullo ser académico de una institución centenaria que ha hecho mucho por el patrimonio y la cultura de Toledo en este siglo. Es algo que era impensable si me lo preguntaban hace unos años, y ahora lo que espero es estar a la altura, ser útil a la institución. En cuanto sea útil a la Academia, lo seré para Toledo y este es mi principal objetivo casi desde que tengo uso de razón.
Dentro de su trayectoria, ¿qué destacaría que le ha servido de empuje para lograr esta silla?
Una de las principales razones es el proyecto 'Toledo olvidado' en genérico, es decir, los libros y las redes sociales dedicadas a la difusión del patrimonio fotográfico de la ciudad. Hay otra facetas, de todos modos, que estoy también convencido también han ayudado: me he involucrado en la vida cultural de la ciudad y también en la lucha por el medio ambiente, en especial la problemática del Tajo. En general, creo que también por no decir casi nunca a nada (risas), que tiene sus ventajas en forma de este tipo de reconocimientos que yo agradezco sinceramente y que son siempre inesperados, porque yo no lo he hecho buscando esto.
¿Cómo se plantea su trabajo ahora como académico?
Es un paso más en el compromiso y estaré a las órdenes de la dirección de la Real Academia para trabajar en aquellos temas donde consideren que seré más útil a a la institución y, por tanto, a la ciudad y provincia.
¿Considera que la protección del patrimonio toledano es suficiente?
Se ha mejorado mucho en las últimas décadas, es decir, el estado en el que están los principales monumentos de la ciudad es infinitamente mejor que, por ejemplo, cuando ses creó la Real Academia en 1916. De hecho, ésta nace como parte de la preocupación de la élite toledana por las perdidas patrimoniales. Luego vino una época muy oscura, la de la Guerra Civil, donde se perdieron monumentos muy importantes como la Posada de la Sangre o la Iglesia de la Magdalena y viviendas e inmuebles de la ciudad.
Ahora bien, siempre hay lagunas y aspectos que mejorar, y ese es precisamente el trabajo que queremos llevar a cabo. A día de hoy la principal amenaza para el patrimonio en Toledo es la situación del Tajo. No debemos olvidar que buena parte de la declaración de la ciudad como Patrimonio de la Humanidad se debe a su ubicación y su armonía, entre el río y el peñasco en el que se asienta esta península que ahora mismo está rodeada de una cloaca.
¿Cree que las Administraciones son conscientes del estado del río?
Creo que son perfectamente conscientes. Otra cosa es como lo van afrontando.
¿Cree que la situación del Tajo puede poner en peligro el estatus de Patrimonio de la Humanidad?
Está claro que si persiste este problema tan grave de contaminación y falta de caudal, una de las bases por las que se declaró Patrimonio de la Humanidad está resentida y no sé hasta que punto podría la UNESCO dar un toque de atención.
En todo caso, no es el único problema que afecta a la ciudad. Nos enfrentamos a una la pérdida de los conventos de clausura debido a que ha bajado el número de religiosas y eso supone que un tercio del casco histórico esté en amenaza de abandono. Es este el área que ocupan los conventos. Son superficies inmensas con un patrimonio inmenso y son buena parte del alma de la ciudad.
¿Cómo se puede evitar este problema que plantea?
Intentaría mantener su uso conventual, para lo cual hay que llegar a un acuerdo con la iglesia para que se prioricen ciudades como Toledo en la redistribución de las religiosas. Si aún así no se pudiera llegar al cupo de personas suficientes para ocupar los edificios hay que plantearse otros usos, lógicamente. Esto es un acuerdo que debe tener una negociación a muchas bandas.
¿Cómo se puede equilibrar la llegada de turistas para evitar que el patrimonio no se vea afectado?
No se debe ver al turismo como enemigo, porque es el mayor amigo del patrimonio porque creo que a nadie se le escapa que si los monumentos están restaurados es porque hay un interés cultural y turístico detrás de ellos. Es lo que lo hace rentable. Pero hay que alcanzar un equilibro para que las tasas no supongan un peligro para el patrimonio y para la vida de los centros históricos, en el sentido de vecindad.
Tampoco se debe demonizar las rehabilitaciones de edificios para fines turísticos pero es bien cierto que este uso no debe expulsar a los vecinos. Se debería potenciar que cada vez hubiera más vecinos, especialmente jóvenes, también. ¿Por qué no liderar desde Toledo que conjugue este uso mixto entre el residencial que es necesario y vital para mantener un casco histórico vivo, y no un museo, con el uso turístico que es una de las fuentes de ingreso de la ciudad?
'Toledo Olvidado'
¿Cómo nace su exitoso proyecto?
Directamente no me planteaba la situación en que estamos ahora mismo. Empecé mandando imágenes a un grupo de amigos por correo electrónico, y ellos me animaron a seguir y me propusieron convertirlo en algo abierto a todo el mundo. Esto pasó en 2008. Sucesivamente, al hacerse más popular debido a esto, el blog se fueron incorporando más seguidores y animándome, todo coincide con el auge de las redes sociales.
Entonces lo hizo en el momento justo
Claro, así decidí también diversificarlo y también el crecimiento de internet hizo que surgiera el micromecenazgo como fuente de financiación de proyectos. Me decidí lanzar así a ello después de cinco años de trayectoria, con conocimiento del proyecto. La primera edición financiada me supuso una gran alegría y sorpresa porque confiaron en mi, creo que salió un libro de una calidad muy alta y a un precio razonable. Eso creo que fue el éxito de un segundo y un tercer libro. Ahora, el cuarto de la edición conmemorativa de los 10 años.
¿Se puede calcular el valor de las imágenes que ha difundido?
Es muy difícil saber el valor de las fotos, porque la mayoría son inéditas.