La Fiesta de los Gancheros en el Alto Tajo, ese río que nos lleva

Cuando José Luis Sampedro escribió 'El río que nos lleva' no imaginó que su prolija descripción del oficio de 'ganchero' en el Alto Tajo de Guadalajara, transportando los troncos sacados del extenso bosque de ribera que crece entre la red de cañones y hoces continua más extensa de Castilla-La Mancha, se convertiría en una nueva tradición -en este caso turística- para reivindicar una profesión que será declarada Bien de Interés Cultural.

Los gancheros desempeñaron su oficio durante cinco siglos, llevando madera a través del río Tajo y el Guadiela en dirección a Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina. Ahora la práctica ha desaparecido pero desde hace ya más de dos décadas la tradición sigue viva a través de la Asociación Gancheros del Alto Tajo.

Entre finales de agosto y principios de septiembre recuerdan aquellos tiempos. Decenas de 'gancheros' se echan al río, ataviados a la antigua usanza y conducen los troncos durante un tramo para su posterior saca.

El público puede ver la 'faena' desde las orillas, aunque en este 2018 por primera vez se celebra un descenso 'amateur'. Será el domingo, 26 de agosto, a las 11 de la mañana. Cualquier adulto “que se atreva”, explica el secretario de la Asociación de Gancheros del Alto Tajo, Abel Moreno, podrá demostrar sus habilidades en el descenso de troncos que comenzará en el mismo lugar donde el día anterior (el sábado 25) se quedó la maderada profesional y se descenderá un considerable tramo de río.

Pero el domingo será solo la culminación de una fiesta que empieza mucho antes. Este año, en abril ya se celebraba una actividad de corta de madera y a lo largo del mes de agosto se ha podido participar en la Escuela Ganchera o en una ruta interpretada.

Es este viernes 24 de agosto cuando comienzan los actos con la presencia de la viuda de José Luis Sampedro, Olga Lucas, y de miembros del equipo de la película 'El río que nos lleva' que llevase al cine Antonio del Real en 1988.

Música tradicional y la proyección de la película arrancan la fiesta a las 19 horas. Ya el sábado es el turno de la 'Maderada'. A primera hora los gancheros se concentran en la plaza Mayor de Peralejos de las Truchas y realizan un pasacalles por el pueblo, ataviados a la antigua usanza repartiendo rolletes y alcarreño.

A las 11 horas se produce la suelta de los troncos en el paraje de 'La Serradora'. Los troncos viajarán por el río hasta que dos horas después se proceda a su saca, ayudados por mulas. Y entonces todo el mundo a comer. Nos espera una comida popular (6 euros), un mercadillo artesano, malabares y cuentos o demostraciones de juegos y oficios tradicionales: escultura con motosierra, cortas de troncos, taller de hierba aromáticas...

Este año la Fiesta Ganchera se celebra en Peralejos de las Truchas pero no siempre es así. Se turnan en acoger el evento. La asociación está conformada por los municipios de Poveda de la Sierra, Peñalén, Zaorejas, Taravilla y el propio Peralejos de las Truchas y se coordinan con los respectivos ayuntamientos.

La declaración del oficio de ganchero como Bien de Interés Cultural servirá, dice Abel Moreno, para “ayudar a conservar la tradición y que no se pierda la memoria de gentes que no solo trabajaban como gancheros. Había que cortar, dar forma a la madera que bajaba ya trabajada por el río...”

Hoy apenas quedan cinco gancheros entre Cuenca y Guadalajara, dos de las provincias más azotadas por la despoblación en España. “Queremos dar a conocer esta tierra, que a veces suena mucho pero lo cierto es que todo el Alto Tajo, el Señorío de Molina de Aragón, la Sierra de Albarracín o la Serranía de Cuenca es el desierto demográfico de Europa”.

Abel Moreno reconoce que hoy se habla más de despoblación. “Hay mucho bombo y platillo en los medios de comunicación pero lo cierto es que cada año los municipios pierden habitantes”.