La Junta de Castilla y León prefiere “una inmigración ordenada” con “un contrato de trabajo” para que “se integren socialmente”

La Junta de Castilla y León aboga por “una inmigración ordenada” con personas que lleguen con “un contrato de trabajo” y permita que “se integren socialmente”. Todo ello para cubrir para cubrir la demanda de trabajadores en empleos de difícil cobertura. “Nosotros somos claramente partidarios de que las personas que vengan desde fuera de España a España estén asociadas al mundo del empleo”, ha indicado el portavoz del Ejecutivo autonómico, Carlos Fernández Carriedo (PP).

El consejero ha explicado que la “realidad” es que hay “miles de puestos de trabajo” en Castilla y Léon que están vacantes y que las propias empresas dan parte de esa carencia a la administración autonómico. Es por eso que, que para cubrir esta demanda, ha reclamado un “esfuerzo” tanto de Castilla y León como a nivel nacional para “mejorar la formación y cualificación de trabajadores para ocupar ese puesto de trabajo”.

El portavoz del Ejecutivo autonómico ha planteado que “sí” que harían “el esfuerzo” para mejorar la formación y la cualificación de los migrantes que soliciten empleo “en aquello que sea necesario”. Además, tratarán de informar sobre aquellos puestos de trabajo de más difícil cobertura algo que sería “positivo” para “el tejido productivo” de la comunidad.

La “inmigración ordenada”, un término dentro del acuerdo de legislatura de PP y Vox

Carriedo ha vuelto a defender la necesidad de una “inmigración ordenada”. Este concepto radica del acuerdo de gobierno firmado con Vox a principio de legislatura y que, a pesar de la ruptura entre ambos, el PP suele hacer mención como guía a seguir en temas como la inmigración.

Este es el modelo de inmigración para Castilla y León al que aspira al PP. Carriedo ha indicado que buscan que lleguen con un contrato y que se integren socialmente y laboralmente para “mejorar” la comunidad. “La nuestra es una autonomía con una tasa de paro, claramente, inferior a la media nacional. Y en este contexto, tenemos miles de puestos de trabajo que las propias empresas detectan esta carencia y su necesidad de cubrirlos”, ha apuntado.

Los “datos y los hechos” que ha relatado Carriedo pasan porque Castilla y León viene “batiendo” mes a mes un récord histórico afiliados extranjeros a la Seguridad Social. En el mes de julio, la Seguridad Social registró 90.306 afiliados extranjeros en el mes en este autonomía, una cifra que supone un incremento del 12,64% con respecto al año anterior.

El también consejero de Economía y Hacienda ha indicado que la llegada de población inmigrante está frenando la pérdida de habitantes en los últimos tiempos. Mientras la población decrecía en el segundo trimestre de 2024 un 0.03% -652 habitantes menos- en Castilla y León, las personas de nacionalidad extranjera aumentaron en 1.942 personas. La población de Castilla y León a 1 de julio de 2024 es de 2.390.321 personas, de ellas 189.347 tienen de nacionalidad extranjera.

Tras la eliminación de ayudas para la inserción sociolaboral que realizó Vox antes de la ruptura, queda pendiente saber qué va hacer la nueva consejera de Empleo con el diálogo social. Carriedo no ha concretado sí recuperarán los programas y ha derivado a las reuniones que va a tener el Ejecutivo autonómico para ver cómo avanzan en los acuerdos con sindicatos y patronal.

“La próxima semana se profundiza en esa dirección, no es una excepción y lo que certifica claramente es la voluntad, el diálogo, de la mano tendida de intentar llegar a alcanzar acuerdos y, sin lugar a dudas, pues, todo lo que tiene que ver con el mundo del empleo y de la integración social, que es un ámbito muy propicio para los acuerdos del diálogo social”, ha agregado Carriedo.